El Sistema de Naciones Unidas pide investigar las muertes en las cárceles de Ecuador

QUITO (Sputnik) — El Sistema de Naciones Unidas en Ecuador expresó su solidaridad con las familias de las personas fallecidas en los hechos ocurridos la víspera en las cárceles en Azuay (sur), Guayas (oeste) y Cotopaxi (centro), además solicitó que se haga una investigación pronta e imparcial y sanciones para los responsables.

"El Sistema de Naciones Unidas en Ecuador expresa su solidaridad con las familias de las personas privadas de libertad fallecidas y con las personas heridas durante los lamentables hechos ocurridos este martes 23 de febrero en los Centros de Rehabilitación Social de Azuay, Guayas y Cotopaxi. El Sistema de Naciones Unidas pide una investigación pronta e imparcial y la sanción correspondiente a los responsables…", dijo el Sistema de Naciones Unidas en Ecuador en un comunicado.

De esta manera se refirió a los violentos enfrentamientos sucedidos en simultáneo en cuatro cárceles del país suramericano que hasta el momento dejan 79 muertos, según el Servicio de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI).

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A través de la nota oficial, el Sistema de Naciones Unidas pidió, además, que Ecuador haga una gestión de la crisis, conforme con los estándares de la Constitución así como los instrumentos internacionales de Derechos Humanos.

Asimismo, hizo un llamado para que se aborden las causas estructurales de la situación en las cárceles, con el objetivo de prevenir que estos hechos se repitan y expresó su disposición para apoyar a las autoridades en ese esfuerzo.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) también lamentó y condenó los actos de violencia ocurridos en los centros penitenciarios de Ecuador.

"La CIDH urge a Ecuador investigar de oficio y con debida diligencia los hechos; y adoptar medidas para evitar la repetición, como aumentar la seguridad y vigilancia en los Centros de Rehabilitación Social, y prevenir el accionar de organizaciones criminales intramuros", dijo la Comisión.

Además, la CIDH recordó al país suramericano el deber jurídico ineludible que tienen los estados de adoptar acciones concretas para garantizar los derechos a la vida, integridad personal y seguridad personal de las personas privadas de libertad.

La Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos, de igual modo, publicó un comunicado en el que señaló su honda preocupación por los hechos y lamentó la pérdida de vidas humanas.

Enfatizó que los sucesos ocurrieron en un contexto de ausencia de políticas públicas que aborden los problemas estructurales de los centros de privación de libertad en Ecuador y de respeto, protección y garantías de los derechos humanos de las personas que se encuentran en ellos.

Según el director del SNAI, Edmundo Moncayo, en las cárceles de Azuay, Guayas y Cotopaxi se concentra el 70% de las 38.000 personas que integran la población carcelaria en Ecuador.