Dicen y Diremos - Sputnik Mundo, 1920
Dicen y Diremos
¿Qué dicen los medios dominantes de EEUU y Europa sobre las noticias de agenda? ¿Qué dicen los medios de Rusia sobre los mismos tópicos? Dos miradas que enfocan el mismo punto. Dicen y Diremos. Presentan: Dmitri Polikárpov y Javier Benítez.

La gota que ha colmado el vaso

La gota que ha colmado el vaso
Síguenos en
En esta edición de nuestro programa hablaremos del teatro del absurdo en relaciones entre Rusia y la Unión Europea.
Cabe recordar a nuestros oyentes que en lo que se refiere a una obra literaria o teatral el absurdo es todo aquello que se percibe como poco razonable, falto de sentido o de conexión lógica dentro del texto o de la escena. En la filosofía, el absurdo es lo que no puede ser explicado por la razón.
Pues, precisamente estas definiciones cuadran perfectamente con la actual crisis en relaciones que están viviendo Rusia y la Unión Europea. Como bien sabemos, los líderes europeos actualmente están considerando imponer nuevas sanciones contra Rusia por una sola razón, o una sola persona, el opositor ruso Alexéi Navalni.
Bruselas sostiene que Navalni fue envenenado por encargo de las autoridades rusas en agosto pasado y considera arbitrarias las acusaciones de fraude contra él. El bloguero y opositor fue arrestado el pasado 17 de enero en un aeropuerto de Moscú cuando regresaba de Alemania. A principios de febrero un tribunal de Moscú ordenó su encarcelamiento al revocarle la suspensión de una condena. Principal crítico del Kremlin tendrá que cumplir tres años y medio de prisión de su sentencia de 2014, menos los meses que pasó bajo arresto domiciliario ese año. Según la corte, Navalni violó las condiciones de control judicial, por lo que accedió a la solicitud de los servicios penitenciarios y de la fiscalía.
Pues esta es la razón que cita la Unión Europea como suficiente para celebrar casi una cumbre que decida el futuro de sus relaciones con Rusia. Entre otras cosas, se habla de sanciones más duras, o incluso de una ruptura completa con Moscú. Los medios internacionales juegan un papel muy destacado en este aparente delirio, preparando o incluso calentando la opinión pública. Y desgraciadamente, en muchas ocasiones lo que ofrecen a su público es pura desinformación, noticias falsas por decir algo.
Un ejemplo muy característico en este sentido es la llamada ronda de corresponsales de la edición es español de France 24. "La vuelta al mundo: la relación Rusia-Unión Europea pasa por un momento crítico", titula.
La verdad es que el corresponsal en Moscú merece un homenaje por su crónica que es la más adecuada y correcta como se darán cuenta luego. Dice una cosa fundamental que es que Rusia está interesada en tener unas relaciones normales con la Unión Europea. Y si no es posible por lo menos tener buenas relaciones con Europa, lo que no es lo mismo. Es decir, Moscú dice cosa muy evidente: no hemos hecho nada contra la Unión Europea, Navalni no tiene nada que ver con las relaciones bilaterales y no entendemos a qué viene todo este ruido.
Lo curioso es que en la crónica de Moscú Navalni, como la manzana de la discordia, aparece en el último momento. Y el público casi queda con la incógnita de quién es el señor Navalni que la UE le da tanta importancia e incluso antepone sus intereses a sus propios intereses económicos.
Pues la respuesta la encontraremos en la siguiente crónica que nos ofrece la corresponsal de France 24 en la capital de la UE.
No podemos decir que esta crónica tiene la misma calidad que la anterior, la del corresponsal en Moscú. Pero mejor para nosotros, porque explica mucho en la manera de presentar esta llamada crisis entre Bruselas y Moscú y su razón, el caso Navalni, por parte de los medios europeos. La historia del bloguero y opositor ruso la añaden a una larga fila de presuntos "pecados" del Kremlin. La corresponsal sostiene que con Navalni "el vaso se ha colmado".
Pero vamos a ver qué está en este vaso de pecados desde el enfoque europeo. Se entiende que inevitablemente hablen de Crimea, conflicto en el Este de Ucrania, injerencias en las elecciones y el envenenamiento de los Skripal. Pero no se entiende qué tiene que ver todo esto con Navalni. Menos aun se entiende qué culpa tiene Rusia en los conflictos en Siria, Libia y Nagorno Karabaj. En este último como bien sabemos Rusia juega un papel muy positivo, ayudando al cese de fuego y al proceso de paz en la región.
Pues, para eso tenemos la tercera crónica, la del corresponsal en Estados Unidos, que aumenta el grado de tensión y nos ofrece el enfoque más radical sobre el caso Navalni, el de la nueva administración de Washington. Es un buen ejemplo que hay que escuchar con atención para no perder los detalles.
La clave y la principal mentira de esta crónica es la afirmación del corresponsal de que Navalni fue arrestado y condenado por destapar los escándalos de corrupción. Es pura mentira y desinformación. Más clara aun porque los colegas del corresponsal de France 24 dicen claramente que Navalni fue condenado por fraude, no por sus actividades políticas.
Pero en cualquier caso es interesante ver cómo funciona esta ronda de corresponsales o "vuelta al mundo" de France 24. Si el corresponsal en Moscú es muy correcto y solo menciona que el caso Navalni es la razón de la actual crisis en relaciones entre Moscú y Bruselas, su colega de la capital de la UE ya desarrolla el tema y va mucho más lejos poniendo el caso Navalni en una fila de presuntos "pecados" rusos. Hablan de Crimea, del conflicto en el Este de Ucrania, de presuntas injerencias en las elecciones y del envenenamiento de los Skripal. No se entiende qué tiene que ver todo esto con Navalni. Menos aun se entiende qué culpa tiene Rusia en los conflictos en Siria, Libia y Nagorno Karabaj.
En parte, ya es una desinformación, pero solo en parte. La desinformación pura y dura llega justo al final, en la tercera crónica, me imagino que es para que el público no se de cuenta. Pero esta afirmación de que Navalni fue arrestado y condenado por destapar los escándalos de corrupción es la clave para vender o explicar el próximo acto de esta obra del teatro del absurdo.
"El tribunal europeo de derechos humanos solicita a Rusia la liberación de Alexéi Navalni", titula la edición en español de Euronews.
La petición de la Corte Europea de DDHH de liberar inmediatamente al líder opositor Alexéi Navalni, se presenta aun menos comprensible porque Navalni está en prisión acusado de un caso de fraude y este caso es de hace algunos años. Pero el público europeo ya no lo escucha porque sabe que Navalni fue arrestado y condenado por destapar los escándalos de corrupción. Misión cumplida.
Parece que todo cuadra, pero la verdad es que siguen sin respuesta varias preguntas importantes. Y la pregunta clave sin respuesta sigue siendo la misma: por qué Navalni es tan importante para la UE que Bruselas está dispuesto a romper relaciones con Moscú citando como pretexto el caso Navalni. Una de las pocas voces en Europa que se dan cuenta de esta absurda situación es la Clare Daly, europarlamentaria irlandesa que criticó a sus colegas por su "rusofobia". La edición en español de RT nos ofrece un fragmento de su reciente intervención.
Hay que reconocer que la eurodiputada hace preguntas realmente buenas. Pero lo más destacable es la reacción de sus colegas a esas preguntas tan evidentes. Nadie se atreve a ofrecer una visión alternativa a lo que dice Daly. Nadie se atreve a contestar que no es cierto lo que dice. Nadie se atreve a explicar cuál es la diferencia entre Navalni y Assange, porque se supone que sí que hay diferencia, a juzgar por la actuación de las autoridades europeas.
Sabiendo que no habrá respuesta, la eurodiputada irlandesa nos hace el gran favor de contestar a nuestra pregunta clave que hemos formulado: ¿por qué Navalni es tan importante para Occidente que Bruselas está dispuesto a romper relaciones con Moscú citando como pretexto el caso Navalni?
Una respuesta tan obvia que explica perfectamente el porqué de la "crisis de Navalni" entre Bruselas y Moscú y en general entre Occidente y Rusia. Para mí, es como mínimo una de las posibles respuestas. En cualquier caso es mejor tener esa respuesta que pensar que la afición de Bruselas a Navalni es absurda e inexplicable y que realmente somos espectadores en el teatro de lo absurdo.
Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала