Rusia "seguirá desafiando" la presencia de Estados Unidos en Oriente Medio

WASHINGTON (Sputnik) — Rusia y China continuarán planteando desafíos para Estados Unidos en Oriente Medio, dijo el jefe del Comando Central (Centcom), general Kenneth McKenzie, durante una discusión virtual en el Instituto de Medio Oriente.

"Sospecho que Rusia seguirá desafiando la presencia de Estados Unidos [en Oriente Medio]", dijo McKenzie.

El militar también afirmó que Rusia continuará persiguiendo sus mayores objetivos estratégicos en la región, incluido el refuerzo de su estatus de potencia mundial.

El comandante del Centcom señaló que la actividad de Rusia en Oriente Medio, junto con la actividad iraní, las preocupaciones de seguridad de Turquía sobre Siria, las principales barreras a la coalición liderada por Estados Unidos para derrotar al grupo terrorista ISIS (autoproclamado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países) socavan y perturban la influencia de Washington en la región.

"En 2020, Rusia y China usaron la crisis regional en curso, las necesidades de infraestructura financiera, la percepción de la disminución del compromiso de Estados Unidos y las oportunidades creadas por el COVID-19 para avanzar en sus objetivos en todo Oriente Medio", dijo McKenzie.

China actualmente importa aproximadamente la mitad del petróleo crudo de la región y continuará expandiendo sus relaciones económicas y comerciales con los países de allí, agregó el jefe del Centcom.

Cooperación entre EEUU y Arabia Saudí

Estados Unidos seguirá compartiendo información de inteligencia con Arabia Saudí para ayudar a Riad a defenderse de las amenazas a su seguridad, pero detendrá el apoyo a cualquier operación ofensiva en Yemen, dijo McKenzie.

"En las últimas semanas se han lanzado varios ataques desde Yemen contra Arabia Saudí. Ayudaremos a los saudíes a defenderse de esos ataques dándoles información de inteligencia cuando podamos sobre ellos. Lo que no haremos es ayudarles a seguir realizando operaciones ofensivas en Yemen", dijo McKenzie.

McKenzie añadió que el interés de Estados Unidos en Yemen es, ante todo, la lucha contra el terrorismo, y subrayó que el apoyo a la coalición liderada por Arabia Saudí que opera en ese país se volvió extremadamente limitado.

Los comentarios de McKenzie se producen después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara el jueves 4 de febrero que su país dejaba de apoyar las operaciones ofensivas lideradas por Arabia Saudí en Yemen, pero que seguiría defendiendo a su aliado contra otras amenazas.

Biden también prometió intensificar los esfuerzos diplomáticos para resolver el conflicto por medios pacíficos y nombró al veterano diplomático Timothy Lenderkin como su enviado especial para Yemen.

El viernes 5, el Ministerio de Asuntos Exteriores saudí dijo que acogía con satisfacción la postura de Estados Unidos de ayudar a resolver la crisis en Yemen por medios políticos.