Pensamientos suicidas: el impacto de la pandemia en el estado psicológico de los médicos rusos

Los investigadores de la Universidad Estatal Psicológica y Pedagógica de Moscú (MGPPU o MSUPE, en inglés) y del Centro de Urgencias Nikolái Sklifosovski estudiaron el estado psicológico del personal médico durante la pandemia de COVID-19.

Los investigadores determinaron los factores necesarios para mantener el buen estado psicológico del personal médico. Los resultados están publicados en la revista Counseling Psychology and Psychotherapy.

Según los científicos, en el período de la pandemia crece el riesgo de que los médicos, enfermeras y demás personal sanitario padezcan el síndrome de desgaste profesional y trastornos depresivos. Los científicos de la MGPPU y los empleados del Centro de Urgencias Nikolái Sklifosovski llevaron a cabo la primera investigación en Rusia dirigida a evaluar el estado psicológico del personal médico de varias regiones del país durante la primera ola de la pandemia.

"La salud y el buen estado psicofísico de los médicos que están en la primera línea del frente es sumamente importante tanto para mantener la salud de toda la población en general como para mejorar las perspectivas de los enfermos en estado grave de curarse", señala la decana de la facultad de Psicología Consultiva y Clínica de la MGPPU, Alla Jolmogórova.

Los científicos explican que las sobrecargas constantes desembocan en un agotamiento emocional y que este es el síntoma más importante del desgaste profesional. También aumenta el nivel de estrés y hay más posibilidades de que aparezcan síntomas de depresión e inquietud. Un 10% de quienes tomaron parte en esta investigación tuvieron pensamientos suicidas.

Un papel importante en el aumento del estrés en todo el personal médico ruso lo desempeña el miedo a contagiarse y a contagiar a sus familiares, así como la ausencia de información clara sobre cómo actuar y dificultades a la hora de organizarse, destacan los científicos. La mayoría de los especialistas examinados en Rusia tenían altos indicadores de desgaste profesional: un 61% de los examinados en la escala de agotamiento emocional y un 92% de los examinados en la escala de despersonalización.

El indicador en la escala de éxitos profesionales fue una excepción. Un 61% de los especialistas mostraron bajos indicadores de desgaste, lo que pone de relieve de forma indirecta un alto nivel de movilización del personal sanitario, apuntan los científicos de la MGPPU y del Centro de Urgencias Nikolái Sklifosovski.

El estado psicológico de los médicos de las regiones rusas —es decir, de aquellos fuera de la capital— fue peor: tuvieron indicadores de depresión e inquietud más altos que el personal médico de Moscú y se quejan con más frecuencia de que carecen de equipos de protección en Rusia.

Según los científicos, un papel muy importante para reducir el estrés lo desempeña una buena organización de las llamadas zonas rojas, donde permanecen los pacientes graves. Para ello es necesario crear recintos o zonas especiales para el descanso, donde sea posible hacer pausas regulares y quitarse los trajes de protección. Otro factor importante es mantener el equilibrio psicológico, lo cual se puede conseguir recibiendo periódicamente información de las autoridades.

Los científicos señalan que para conservar la buena salud mental del personal médico durante la pandemia es necesario implementar servicios psicológicos directamente en los centros médicos. Además de apoyo financiero, el papel clave a la hora de conservar su salud mental lo desempeña también el apoyo psicológico por parte de los familiares, de sus compañeros de trabajo y de la sociedad así como la creación de un ambiente informal y amistoso en el puesto de trabajo, destacan los científicos.

Los empleados de la facultad Psicología Consultiva y Clínica de la MGPPU junto con sus colegas del Centro de Urgencias Nikolái Sklifosovski continúan investigando el estado psicológico de los médicos que luchan contra la pandemia en Rusia.