El Tribunal de Justicia boliviano avala un archivo de proceso por supuesto fraude electoral

LA PAZ (Sputnik) — El Tribunal de Justicia de La Paz avaló la decisión de una jueza anticorrupción de suspender y archivar, por falta de pruebas, un proceso contra el expresidente boliviano Evo Morales (2006-2019) y algunos de sus excolaboradores por un supuesto fraude electoral de 2019.

"No había en los informes del órgano electoral ni en el reporte de la Organización de los Estados Americanos (OEA) adjuntó a la denuncia, constancia de algún elemento de prueba del denunciado fraude", dijo a reporteros el presidente de ese tribunal, Jorge Quino.

La declaración de Quino parecía cerrar definitivamente el caso, luego de que el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Salvador Romero, dijera que este órgano presentó los informes que le requirió la fiscalía y que al final era "respetuoso" de la decisión judicial.

Fraude "Monumental"

Mesa, quien fue derrotado por Morales en las elecciones de 2019, calificó varias veces de "monumental" al fraude que le habría impedido enfrentar al exgobernante indígena en una segunda vuelta tras los comicios del año pasado, anulados en medio de la crisis desatada en parte por esa denuncia.

El expresidente, que formalizó en febrero de 2020 ante la justicia su denuncia del fraude, insistiendo en que fue "monumental", volvió a perder ante el Movimiento Al Socialismo (MAS) y aún por mayor margen en las elecciones de octubre pasado, ganadas por el masista Luis Arce.

Tras el archivo del proceso, Mesa denunció el martes 15 de diciembre que la jueza Castro había tomado una decisión política y ratificó su denuncia pública contra Morales, repitiendo afirmaciones de un informe de la OEA aunque sin señalar si presentaría algún recurso legal para reabrir el caso.

Según el magistrado Quino, en sucesivos informes del Tribunal Supremo Electoral y del Tribunal Electoral de La Paz, considerados por la jueza Castro, "no habrían existido los elementos constitutivos para la existencia de un fraude electoral en las elecciones de octubre de 2019".

Además, "el informe preliminar de la Organización de Estados Americanos no hace referencia a los elementos constitutivos de un fraude", indicó.

Quino remarcó que, según la Ley de Régimen Electoral, un proceso penal sobre delitos electorales solo puede desarrollarse a partir de un informe oficial del Tribunal Supremo Electoral, y en el caso Mesa-Morales ese reporte no aportó pruebas del fraude.

Informes judiciales revelaron que, tanto la denuncia de Mesa como el reporte de la OEA se centraron en supuestas irregularidades en el sistema de conteo rápido de los votos, que solo tiene valor informativo y no afecta al cómputo oficial.

El jefe del TSE, Romero, dijo el martes en la noche, después de presentar un informe al parlamento, que este organismo, que no fue denunciante original del supuesto fraude, presentó los informes requeridos.

"El organismo electoral ha aportado todos los elementos que le han sido solicitados por las partes, en particular por el Ministerio Público, para que todos estos elementos sean valorados por las autoridades judiciales", explicó Romero.

Ante esta situación, el pocero del presidente Arce, Jorge Richter, dijo este 16 de diciembre que para el Gobierno del MAS está claro que el fraude no pasó de ser una denuncia sin prueba.

"Está claramente visto en los hechos, lo que hay es una referencia retórica y narrativa al fraude; pero, en términos reales, más allá de lo que señala el inconsistente informe de la OEA, no se pudo evidenciar que exista un fraude", afirmó.

La denuncia de fraude y el informe de la OEA fueron también descalificados por varias investigaciones de universidades, diarios y expertos estadounidenses.