La épica vida del expresidente uruguayo Tabaré Vázquez en diez hitos

El dos veces presidente de Uruguay Tabaré Vázquez falleció a los 80 años, dejando atrás una vida en la que en varias oportunidades hizo historia, desde abrir el camino para las victorias de la izquierda en el país hasta su lucha contra el tabaquismo que lo llevó a vencer a la mismísima Philip Morris.

Son varios los elementos que hacen que Tabaré Vázquez no haya sido un político más en la historia de Uruguay, país al que gobernó dos veces entre 2005 y 2010 y entre 2015 y 2020. A pesar de que el nombre de José Mujica logró mayor notoriedad en el mundo, el de Vázquez se ganó un lugar fundamental en el recuerdo de los uruguayos y en el ascenso de la izquierda latinoamericana.

Es que más allá de sus acciones de Gobierno, la vida de Vázquez estuvo signada por hitos que cambiaron la historia o, al menos, dejaron su huella grabada a fuego.

Diez hitos en la vida de Tabaré Vázquez

Antes de ingresar a la política, Vázquez se había ganado cierta fama como presidente del Club Atlético Progreso, un histórico pero humilde club de fútbol oriundo del barrio montevideano de La Teja, zona obrera y popular de la capital uruguaya.

Por complicaciones con el calendario, el torneo uruguayo de 1989 se disputó a una sola ronda, en régimen de todos contra todos. Contra todo pronóstico, Progreso terminó primero entre 13 equipos, superando a grandes del fútbol uruguayo como Peñarol y Nacional, que venían de ser campeones de la Copa Libertadores de América en 1987 y 1988 respectivamente.

Vázquez fue considerado como una de los responsables de aquella gesta, que culminó su etapa al frente del club que presidía desde 1979 y que había incluido un ascenso desde la B hacia la Primera División en 1985.

Su buena gestión en Progreso, donde se había destacado con inéditas obras sociales, hizo que comenzara a ser visto como un posible dirigente político desde el Frente Amplio, la coalición de izquierda conformada en Uruguay en 1971 y que hacia 1989 participaba de sus terceras elecciones.

En realidad, el Frente Amplio no tenía serias esperanzas de ganar las elecciones departamentales en Montevideo. De hecho, el candidato elegido era Mariano Arana pero este no aceptó y sugirió a Vázquez, que dio el sí y se metió de lleno en la campaña, haciendo énfasis en las promesas incumplidas de los anteriores intendentes del Partido Colorado y comprometiendo mejoras en la limpieza y el transporte.

Vázquez logró imponerse ante los candidatos del Partido Colorado y el Partido Nacional y se convirtió en el primer intendente que no respondía a uno de los dos partidos tradicionales del país. Esa victoria, además, le permitió proyectarse como una figura de peso en el Frente Amplio y en la política nacional.

• Primer candidato en ganar en primera vuelta

La reforma constitucional que Uruguay afrontó en 1997 modificó el sistema electoral, obligando a que cada partido presentara un único candidato y que, en caso de que ningún candidato a la Presidencia superar el 50% de los votos, hubiera una segunda vuelta o balotaje entre los dos más votados.

El sistema fue implementado por primera vez en las elecciones de 1999 y el Frente Amplio, con Tabaré Vázquez como candidato, fue la formación política más votada en la primera vuelta. Una coalición de los partidos tradicionales fue clave para evitar su victoria en el balotaje y el colorado Jorge Batlle se hizo con el Gobierno.

Sin embargo, el Frente Amplio apareció como el gran favorito para los siguientes comicios, en 2004. La grave crisis económica que el país afrontó en 2002 propició la debacle electoral del Partido Colorado y Vázquez, en su tercera candidatura presidencial, se mostraba como el casi seguro ganador.

Las elecciones del 31 de octubre de 2004 confirmaron las previsiones y aseguraron la victoria de Vázquez con el 51,67% de los votos, haciendo innecesaria una segunda ronda. Fue la primera vez en que un candidato logró el apoyo de más de la mitad de los votantes y la gesta no pudo repetirse en las siguientes tres elecciones.

Quizás su correligionario José Mujica haya sido más reconocido internacionalmente por este tipo de gestos, pero Vázquez también supo ser importante en el aspecto simbólico. Luego de ganar las elecciones presidenciales por primera vez en 2004, Vázquez sorprendió al anunciar que no viviría en la residencia presidencial destinada a los presidentes, una mansión en el barrio Prado de Montevideo. En lugar de eso seguiría viviendo en su propia casa, una vivienda también de amplias dimensiones y a pocas cuadras de la oficial.

Vázquez también hizo historia al cambiar la sede del Poder Ejecutivo. Hasta su Gobierno, los presidentes y funcionarios de Presidencia cumplían sus labores en el Edificio Libertad. Vázquez, con la intención de destinar ese edificio a un hospital, reactivó la construcción del Palacio de Justicia, un proyecto que había quedado trunco y dejó los cimientos de un edificio a medio construir en la plaza más importante de Montevideo.

En 2009 Vázquez inauguró la Torre Ejecutiva, que se mantiene como sede de Presidencia. El edificio Libertad, pasó a ser la sede de ASSE, el prestador público de salud de Uruguay y de su Instituto de Ortopedia y Traumatología.

El 1 de marzo de 2006, cuando se cumplía el primer año de mandato de Vázquez, comenzó a regir el decreto que prohibió fumar tabaco en todos los espacios cerrados públicos. La medida colocó a Uruguay entre los primeros países del mundo en implementar una medida así y, si bien generó resistencia en alguno sectores, cambió para siempre la relación de los uruguayos con el cigarrillo.

De hecho, cifras oficiales dan cuenta de que en los diez años siguientes a las medidas la cantidad de nuevos fumadores en Uruguay disminuyó.

El combate de Vázquez al tabaco tuvo sus consecuencias. La tabacalera multinacional Philip Morris demandó al Estado uruguayo el 19 de febrero de 2010, al entender que las medidas antitabaco de Vázquez —que incluyeron advertencias en las cajas de cigarrillos y prohibición de su publicidad— perjudicaban el negocio de la empresa y contravenían un tratado de inversiones entre Uruguay y Suiza, sede de la empresa.

El caso sacudió a Uruguay, que debió consolidar una férrea defensa legal para demostrar que tenía derecho a adoptar medidas sanitarias de ese tipo. En esa tarea, Uruguay contó con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dado que se consideraba al episodio como una muestra de las intimidaciones que podrían sufrir otros países si iban por el mismo camino.

En 2016, seis años después de comenzado el juicio y con Vázquez nuevamente en la Presidencia, el presidente uruguayo confirmó que su país le había ganado el juicio a una de las tabacaleras más grandes del mundo.

Una de las apuestas fuertes del primer Gobierno de Vázquez fue el denominado Plan Ceibal, a través del cual cada niño en edad escolar recibiría una computadora portátil. Uruguay fue así el primer país del mundo en universalizar la informática, poniendo en práctica la idea del informático estadounidense Nicholas Negroponte.

La entrega de computadoras se inició en 2007 y en 2018 el Estado ya había entregado más de 2 millones de dispositivos. El plan permitió que el acceso a computadoras aumentara de 30% a 94% en niños de entre seis y 13 años y de 9% a 93% en niños de bajos recursos. Por si fuera poco, el plan modificó la forma de dar clases en las aulas, sumando las tareas virtuales dentro del horario escolar.

Con la misma idea que el Plan Ceibal, Vázquez instrumentó durante su segundo Gobierno el Plan Ibirapitá, a través del que se entregaron tablets a los jubilados con ingresos anuales menores a 900 dólares. De esa forma se buscaba introducir a una generación en el uso de este tipo de aparatos informáticos. En 2019, el Gobierno ya había entregado más de 200.000 tablets.

La victoria de Luis Lacalle Pou y el Partido Nacional en las elecciones de octubre de 2019 significaron el final de un período de tres gobiernos de la coalición de izquierda Frente Amplio. El cambio de rumbo motivó algunas rispideces pero Vázquez buscó echarlas por tierra rápidamente.

Vázquez se mostró dispuesto a colaborar en la transición junto a Lacalle Pou e incluso lo invitó a la asunción del presidente argentino Alberto Fernández en Buenos Aires el 10 de diciembre de 2019, tan solo una semana después de las elecciones. En aquella oportunidad, Vázquez sorprendió por acercarse a Fernández junto a Lacalle Pou, en un gesto inédito entre dos dirigentes de peso de diferente signo político.

En agosto de 2019, un mes después de la muerte de su esposa María Auxiliadora Delgado, Vázquez sorprendió a los uruguayos al comunicar que se le había detectado un "nódulo pulmonar con características de un proceso maligno". Se trataba, en definitiva, de cáncer de pulmón en el cuerpo del mandatario que había librado una lucha sin cuartel contra el tabaco.

Aún en la Presidencia, Vázquez siguió un pormenorizado tratamiento y en diciembre del mismo año comunicó que estaba "sin evidencia actual" del cáncer de pulmón. De todos modos, debió continuar con chequeos periódicos.

Si bien logró superar el cáncer en ese momento, a finales de noviembre de 2020 se supo que el tumor había hecho metástasis en el páncreas y que su salud estaba muy deteriorada. Acompañado de sus hijos y allegados, Vázquez permaneció con internación domiciliaria hasta la madrugada del 6 de diciembre, cuando falleció.