Es habitual comprar un plátano y que, fruto del descuido, madure demasiado y empiece a mostrar muchas manchas marrones. Lo que no es tan habitual es que la fruta se vea de un intenso color azul, aunque eso es exactamente lo que pasa cuando madura de más.
"¡Estaba enredando con mi linterna de rayos UV y observé esto en mis plátanos! ¡Nunca habría pensado que las zonas excesivamente maduras tenían anillos que brillan!", comentó el usuario pewpewyouuk acompañando a sus fotos.
Usando rayos ultravioleta este internauta dio con un fenómeno que no todo el mundo conoce, pero que ya ha sido estudiado anteriormente. Tal y como observaron científicos de la Universidad de Columbia (EEUU) y de la Universidad de Innsbruck (Austria) hace más de una década, este fenómeno se debe a la clorofila de la piel del plátano.
El intenso azul que se ve en la imagen de pewpewyouuk se debe precisamente a las moléculas de clorofila presentes en la piel de la fruta, que, a medida que se van pudriendo, van mostrando un halo que, iluminado con rayos UV, se ve de esa manera.
La clorofila es una molécula clave para el funcionamiento de los organismos de las plantas y, en definitiva, imprescindible para gran parte de la vida en la Tierra. Precisamente con su ayuda las plantas convierten el dióxido de carbono, agua y luz solar en oxígeno, azúcares y almidones. Tanto es así que sus procesos de vida son claramente visibles incluso desde el espacio exterior. Un ejemplo de ello es el foliaje rojo y naranja que vemos cada otoño, y es causado directamente por la ausencia de clorofila en las hojas.