El Congreso de los Diputados procederá a votar el 29 de octubre la propuesta del Gobierno de ampliar a seis meses el estado de alarma decretado en el Consejo de Ministros extraordinario cuatro días atrás.
La intención del Gobierno es evitar tener que acudir a una votación parlamentaria cada 15 días para obtener la renovación del estado de alarma. Lo que se pretende ahora es que quede habilitado hasta el 9 de mayo de 2021 para que las comunidades autónomas puedan servirse de él en tanto que instrumento jurídico con el que dotarse de cobertura legal para instaurar las restricciones que consideren oportunas en función de la situación epidemiológica en sus territorios.
Con la mayor crisis social por delante, protestas en toda Europa, sectores al colpaso, un presidente del Gobierno centrado en una negociación absurda sobre si dar cuenta o no en por el estado de alarma y regateando entre dos, cuatro o seis meses. Desconexión total de la realidad
— Luca Costantini (@LucaCostant) October 28, 2020
El apoyo amplio tendrá que negociarse
Varios grupos parlamentarios han expresado sus reticencias. Y no solo de la oposición, donde el Partido Popular aboga por una duración de solo ocho semanas con el objetivo de salvar la campaña navideña.
Pero los de Pablo Casado la han rechazado y el líder popular ha manifestado que el presidente "trata de eludir el Parlamento".
El Gobierno está a tiempo de aceptar mi propuesta de una alarma de 8 semanas, el doble que el resto de países europeos, que regularía 3 puentes y salvaría la Navidad para mantener empleos y dar esperanza a millones de españoles, sobre todo a los mayores que viven sin su familia. pic.twitter.com/Poash1XHeh
— Pablo Casado Blanco (@pablocasado_) October 28, 2020
Tras el debate de la moción de censura de Vox al Gobierno celebrado el 21 y 22 de octubre, la aparente ruptura del PP con este partido tal vez influencie la mayor o menor inflexibilidad de la postura que adopten los populares, de alguna manera obligados ahora a endurecer sus planteamientos.
"Es que el resultado de la moción, que todo el mundo sabía que no iba a prosperar, da sin embargo como vencedor a Vox, que queda ahora como única oposición", afirma el politólogo y expolítico Jorge Verstrynge. "Se ha puesto en el centro del debate y ha demostrado que el PP ha pasado de ser la derecha cobardica a la derecha traidora".
Disenso incluso entre los apoyos
Formaciones del bloque que apoyó la investidura del Gobierno de coalición PSOE-UP señalan también el carácter "excesivo" del plazo, una situación que según ERC o EH Bildu privaría a la medida del necesario control parlamentario.
Según el líder de Más País, Íñigo Errejón, el bloque de partidos que apoyó la investidura de Sánchez está dando forma a una enmienda al decreto ley que activó el estado de alarma. Por el momento, el presidente español parece dispuesto a comparecer en sede parlamentaria cada dos meses, un gesto acaso fruto de esta negociación.
Acabamos de proponer en el Congreso que durante el Estado de Alarma el Gobierno se someta una vez al mes al control del parlamento. Estado de Alarma, sí. Rendición de cuentas, también. pic.twitter.com/c9FjZNWMFv
— Íñigo Errejón (@ierrejon) October 28, 2020
Presumiblemente se debate la frecuencia de una posible votación de la prórroga para ratificar las condiciones, pues según ellos podrían variar durante esos meses. En todo caso este espacio de tiempo se asume como "abusivo", tal y como lo describe Laura Borràs, portavoz parlamentaria de JxCat.
La postura del Gobierno
Desde el Gobierno aducen que la naturaleza del decreto es distinta y que corresponderá a los presidentes autonómicos rendir cuentas en sus parlamentos regionales tras la asunción o no de restricciones en sus territorios.
La ministra portavoz, María Jesús Montero, recordó que los dirigentes regionales solicitaron "abrumadoramente" la adopción del estado de alarma, motivo por el cual será el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y no el presidente del Gobierno quien acudirá a solicitar la autorización de la prórroga a los diputados.
El 29 de octubre Pedro Sánchez estará además ocupado en otros asuntos, pues participará a las 18:30 horas en una videoconferencia del Consejo Europeo convocada para abordar cuestiones relativas a la pandemia. Pero la sesión en el Congreso es por la mañana.
Ofrezco a la oposición revisar el estado de alarma en el Consejo Interterritorial del SNS en 4 meses. Si este órgano con representación de todas las CC.AA. decide que no sigue siendo necesario, lo levantaremos de inmediato. Ahora es la herramienta más eficaz para frenar al virus. pic.twitter.com/lGiZkiYkes
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) October 28, 2020
Perspectiva insuficiente
La brega política en torno a la larga duración del estado de alarma sin necesidad de prórrogas cada 15 días, puede ser también una expresión del intento de la clase política de salvar una realidad y un modo de vida que pueden estar perdidos a corto, medio y, tal vez, largo plazo.
Para este sociólogo, la propuesta a debatir y votar en el Congreso es la prueba de que el Gobierno "reconoce por primera vez la necesidad de hacer planes a muchos meses vista". "Pero si esto se alarga después de mayo, aquí se monta una muy gorda", añade Verstrynge. "Y en Francia directamente se arma la de Dios, la gente no lo va a aceptar".
El Gobierno justifica los seis meses de estado de alarma porque lo aconsejan los expertos. Otra vez los expertos, los mismos que hace dos semanas, según Illa/Simón, cuestionaban que estuviéramos ante una segunda ola del covid.
— AlvaroYbarraPacheco (@aybarrapacheco) October 26, 2020
Miller, que es el vicedirector del Instituto de Políticas y Bienes Públicos del CSIC, advierte del peligro de haber creado expectativas para recuperar una realidad anterior. "Se está jugando con las expectativas para que la población no se venga completamente abajo", sostiene, "porque tras el tiempo ya transcurrido, plantearnos ahora un escenario a seis meses, o a uno o dos años más, sería muy difícil de aceptar para muchas personas. Pero esta es la realidad".
"Son pasos tímidos hacia la aceptación de que este problema es de largo plazo y que la situación que estamos viviendo ―mascarillas, distancia social, restricciones― no es algo puntual, sino cosas que se van a quedar entre nosotros durante mucho tiempo", concluye Luis Miller. "Y eso es lo que sucede en el Parlamento, que está empezando a aceptar la situación. Pero va a costar mucho", concluye .