Aunque en el periodo en cuestión las exportaciones mexicanas disminuyeron 4,3% a tasa interanual, los flujos del comercio mundial registraron un descenso ligeramente mayor, de 4,5%.
Por ello, la UNTAD estima que el comercio mundial mantendrá una tendencia negativa durante el cuarto trimestre de 2020, con una caída de 3%. Sin embargo, la incertidumbre por los efectos de la pandemia en la actividad económica mundial podría agravar la caída.
La proyección de los indicadores del comercio mundial prevén una disminución en este sector de 7% a 9% en 2020, suponiendo que la tendencia observada en el tercer trimestre se mantenga en el cuarto trimestre. Pese a ello, los efectos de la desaceleración en el comercio internacional muestran que ninguna de las principales economías se ha librado de las afectaciones por el COVID-19.
En contraste, el comercio exterior en los países desarrollados mostró caídas más pronunciadas, tanto en sus importaciones como en sus exportaciones. El descenso más importante se presentó en la región de Asia occidental y meridional, donde las importaciones disminuyeron 35%, al tiempo que las exportaciones bajaron 41%.
La UNTAD también resaltó que el comercio entre países en desarrollo ha sido relativamente más resistente durante los últimos meses, ya que presentó una disminución cercana al 16% en el segundo trimestre de 2020, pero mostró una caída de 8% en julio.
"Para México ¿qué ha ocurrido? Una caída enorme en mayo y una recuperación en junio y julio en exportaciones, sin embargo, seguimos 20% de lo que estábamos el año pasado. Con exportaciones petroleras cayendo de una forma aguda, mientras que las no petroleras se recuperan con mayor velocidad, particularmente las manufactureras", afirmó durante un foro virtual organizado por la Universidad CETYS de Tijuana.
