La evidencia adicional, proporcionada por el Departamento de Justicia para apoyar sus preocupaciones sobre la seguridad nacional, no ha cambiado la opinión de la jueza de que las prohibiciones violarían los derechos a la libre expresión de millones de estadounidenses de habla china que dependen de la aplicación.
El mes pasado, Beeler emitió una orden preliminar que bloqueaba la orden del Departamento de Comercio de EEUU que debía entrar en vigor a partir del 20 de septiembre por una demanda presentada por los usuarios de WeChat.
El Departamento de Justicia apeló esa orden de Beeler, pero la jueza todavía no ha emitido una decisión final y es poco probable que haya un fallo antes de diciembre, señala la agencia Reuters.
La Casa Blanca busca imponer unas restricciones a la app china WeChat, junto con TikTok, porque supuestamente podrían socavar la seguridad nacional de EEUU, especialmente en lo que respecta a la recopilación de información sobre los ciudadanos estadounidenses.
Un grupo de usuarios de WeChat demandó a la Administración Trump en agosto con el fin de bloquear su decreto del 6 de agosto que prohibiría WeChat en Estados Unidos.
