Autor de la ya mítica tira "Mafalda", que fue traducida a decenas de idiomas y cuyos libros se venden por millones, incluso hoy en día a casi 60 años de su creación, Quino es también conocido por su capacidad para retratar las luces y las sombras de la condición humana, con una mirada universal que mantiene vigente viñetas dibujadas varias décadas atrás.
Así, tanto en Mafalda como en el resto de su obra, Quino despliega su visión del capitalismo, del autoritarismo, las diferencias de clase y la codicia de los poderosos; también el machismo y el rol de los jóvenes en la sociedad, con la capacidad de hacer de lo que en principio puede parecer doméstico y coyuntural, algo global y sostenido en el tiempo.
Caricaturista universal
Quino nació en la ciudad argentina de Mendoza, donde comenzaría su carrera como dibujante y donde más de ocho décadas después dejaría huérfanos no solo a sus personajes más recordados y queridos, sino también a millones de lectores y lectoras que crecieron con sus viñetas.
El dibujante colombiano, frecuente colaborador de medios como El Espectador y El País (de Colombia), define a Quino como el "caricaturista latinoamericano universal", por haberle dado a su obra un carácter tal que permite que cualquier lector, en cualquier parte del mundo, pueda identificarse con ella.
"Quino no hizo caricaturas reactivas, sino reflexivas. La mayoría de nosotros hacemos de las primeras (reactivas), enfocadas en el día a día, en la cosa política, situacionales. En cambio él tocaba todos los temas de manera universal, y con una postura crítica y de denuncia frente a la pérdida de valores, de humanidad y, sobre todo, de gobernabilidad", observa Mheo.
"Cada trabajo suyo era una obra de arte en potencia. Yo estudio sus dibujos, me sirven de guía. Y, aunque no tenemos la misma línea, llevo a Quino en la sangre. Es una pérdida irreparable para el humor gráfico universal", aseguró Sánchez Armas, cuyos dibujos aparecen actualmente en el semanario humorístico Palante, en el sitio web Cubahora, el periódico Ahora, de Holguín, y el canal panárabe Al Mayadeen.
Amadeo Gonzáles, caricaturista peruano fundador de la revista Carboncito (2000-2016) y actual organizador del Festival Carboncito, dedicado a la difusión del arte de la historieta, destacó a esta agencia el trabajo de Quino en su tira más famosa y leída: Mafalda.
"Me causa mucha reflexión cómo una niña (Mafalda) puede actuar como una niña que no quiere tomar la sopa, pero a la vez también hablar de temas tan profundos y que quizá no te esperas que en una tira cómica puedan aparecer. Me parece sorprendente cómo Quino pudo trabajar sus personajes para dejar una lección ética para quienes manejan el poder", dice el artista peruano.
Hoy, algunas de las frases de esta niña rebelde y contestataria, preocupada por la paz mundial y militante contra la sopa, así como las de sus entrañables amigos, pueden verse en todo el mundo, retratadas en banderas, posters y remeras, lo que demuestra su estatus de figura global.
Además de Mafalda, Quino publicó más de 20 volúmenes de humor gráfico, la inmensa mayoría tras la culminación de la que terminaría siendo su obra más importante, la que lo ubica como uno de los grandes nombres del arte argentino y mundial.