La fecha fue anunciada por la magistrada que preside la causa, Vanessa Baraitser, al final de la audiencia celebrada este 1 de octubre en el Tribunal Central Penal, el famoso Old Bailey de Londres.
El fundador de WikiLeaks seguirá hasta entonces en prisión preventiva, en el penal de máxima seguridad de Belmarsh, según le comunicó la jueza.
La jueza dictará sentencia "a las 10 de la mañana del 4 de enero del nuevo año" en el histórico tribunal londinense, según especificó antes de suspender la audiencia.
La defensa de Assange dispone de cuatro semanas para preparar las conclusiones de sus argumentos, que entregará por escrito a la magistrada a mediados de noviembre.
Los abogados de la fiscalía británica, que representan a EEUU en el proceso, tendrán otras dos semanas adicionales para ultimar su respectivo alegato.
El periodista e informático australiano, de 49 años de edad, está citado a comparecer por video conferencia ante la Corte de Magistrados de Westminster el 29 de octubre, en una sesión procesal rutinaria.
“No se espera que suceda nada substancial”, admitió Baraitser antes de indicar que probablemente se ausentará de dicha audiencia procesal que la ley requiere periódicamente en casos de presos en régimen cautelar.
Ambas partes tienen derecho a recurrir la decisión que tome la jueza en este extraordinario pulso que bien podría llegar hasta la Corte de Derechos Humanos de Estrasburgo.
El veredicto final indicará si la libertad de prensa tiene prioridad sobre la protección de secretos de Estado aunque estos encubran abusos de poder, como sugieren imágenes y documentos escritos difundidos por WikiLeaks y otros medios internacionales.