Si no te gusta el café, eres de los pocos. El café es, junto con el té, de las bebidas más consumidas del mundo además del agua. Aunque su origen no es colombiano, el país sudamericano es el más relacionado con sus cultivos y comercialización pero, ¿de dónde viene el café?
Historia del café
La planta del café, llamada cafeto, tiene su origen en África, más precisamente en Etiopía. En sus inicios, el café se consumía en infusiones y también masticando sus hojas, pero los árabes lo expandieron a Asia en el siglo XVI. Un siglo más tarde llegó a Europa a través de Venecia, y recién en el siglo XVIII llegó a América.
Holanda se encargó de trasladarlo al nuevo mundo, con el fin de dejar de depender del comercio con Arabia. A través de sus colonias, Holanda fue durante el 1800 el principal productor mundial del café. Aunque no está claro el momento exacto en el que llegó a nuestro continente, una de las teorías más sólidas es que fue a través de lo que hoy es Surinam, y desde allí se extendió a Colombia y Brasil, según recoge la organización Café de Colombia.
¿Qué tiene el café de Colombia?
Los cultivos de café en Colombia tuvieron mucho éxito, y rápidamente se convirtió en una bebida popular. Durante la segunda mitad del siglo XIX el país se consolidó a nivel mundial como exportador del producto, y en 1920 se volvió el principal país exportador de la variedad arábica. Sin embargo, Brasil es el principal exportador de café a nivel mundial. Entonces, ¿por qué la fama colombiana?
Según el blog de café Candelas, la respuesta más probable está ligada con la calidad de su café. Allí se cultiva solo la variedad arábica, que es la más prestigiosa por su sabor y aroma.
Entre sus características, se encuentran varios elementos que los distinguen del resto de los cafés del mundo. "El café colombiano posee un carácter propio y distintivo, fácilmente reconocible por los especialistas cafeteros. Su aroma, sabor y textura son una experiencia sensorial única, que ha sido alabada en todo el mundo", evalúan desde El Mundo del Café.
Por sus métodos de cultivo y tierras, según dicen, se destaca el aroma "dulce y acaramelado, con ciertas notas a coco" y el sabor "suave al paladar, dulce y afrutado, con notas que nos recuerdan al de los cítricos y con ligeros toques a nuez".
La crisis de la industria cafetalera
La Organización Internacional del Café aprovechó el 1 de octubre de 2020, Día Internacional del Café, para alertar acerca de la grave crisis que sufre la industria desde hace al menos dos años.
Por ello, la OIC creó una petición en la plataforma Change.org para concientizar acerca de la problemática, que requiere de 5.000 firmas.
"Debido a un enorme descenso en los precios del café –que están en el nivel más bajo en 15 años– millones de caficultores ya no ganan lo suficiente para vivir o para sostener a sus familias. Investigaciones independientes indican que los agricultores reciben el equivalente de nada más que un centavo por una taza de café que cuesta US$3. Si las cosas no cambian, más agricultores se verán forzados a abandonar los cafetales y a emigrar a zonas urbanas o al extranjero para sobrevivir", dice la petición.
