"Durante la noche, al menos 24 personas fueron detenidas por distintos cargos, incluidas por reunión ilegal, rechazo a dispersarse y disturbios", comunicó el Departamento de Policía Metropolitana de Louisville (LMPD).
Los manifestantes, según la Policía, también rompieron varias ventanas de un restaurante, dañaron varios autobuses de la ciudad e intentaron provocar incendio. Los manifestantes se dispersaron sobre las 23 horas.
Las protestas estallaron el 23 de septiembre en Los Ángeles, Seattle, Portland y San Diego después de que un gran jurado se negara a acusar a los oficiales de policía del asesinato de Taylor en su casa en Louisville en marzo.
Taylor fue asesinada cuando tres agentes de policía ejecutaron una orden de registro de drogas y su novio presuntamente disparó un primer tiro por temor a que los entrantes fueran ladrones.
El disparo provocó que los cuatro agentes de Policía lanzaran una lluvia de balas contra la casa, alcanzando a Taylor seis veces.
Desde entonces, activistas, celebridades y manifestantes se han propuesto mantener su nombre en el ciclo de noticias y pedir justicia por su muerte.
El alcalde de Louisville, Greg Fischer, anunció la semana pasada que la ciudad pagará 12 millones de dólares a la familia de Taylor como parte de una indemnización por su muerte.