El 21 de septiembre Rusia anunció que dejaría de efectuar vuelos de repatriación, el último vuelo se realizará el 25 de septiembre de Lárnaca a Moscú.
"Cooperamos de manera más activa en la evacuación de nuestros ciudadanos con los países de la Comunidad de Estados Independientes, América Latina, África y Asia", dijo la portavoz de la Cancillería rusa María Zajárova, citada en el comunicado.
Destacó el papel del Ministerio de Exteriores de Rusia y otros departamentos competentes, como Ministerio de Transporte, de Comunicación, Agencia Federal de Transporte Aéreo, entre otros.
"Los vuelos de repatriación abarcaron casi todos los continentes, incluidas América Latina y África, más de 70 países en total, unos 100 puntos de partida", informó la diplomática.
Zajárova expresó la esperanza de que el programa de repatriación "pase a la historia" como evento "único" y "sin precedentes".
La situación epidemiológica en el mundo se mantiene tensa, advirtió, y confió en que la experiencia ya obtenida permita evitar que los acontecimientos de marzo y abril pasado se repitan.