"Peso de estación lunar: 8 toneladas; período de estancia en la Luna: hasta 20 días; número de cosmonautas exploradores: 3", especificaba un documento firmado en 1967 por el entonces director del centro Tsniimash, la empresa rectora de la corporación espacial rusa Roscosmos.
Las primeras misiones para desplegar una base lunar soviética estaban programadas para 1973, pero nunca llegaron a realizarse. Los cuatro lanzamientos de un cohete superpesado N-1, efectuados desde la base espacial de Baikonur entre 1969 y 1972, fueron fallidos, por lo que la URSS optó por cancelar su programa lunar.
En 2019, el director general de Roscosmos, Dmitri Rogozin, propuso a China cooperar en la creación de una base lunar. En agosto pasado, Rogozin avanzó a Sputnik que las dos partes abordarían en los próximos meses conversaciones para perfilar la futura base y definir sus tareas.
Rusia se plantea enviar su primera misión tripulada a la Luna en 2030, según una hoja de ruta redactada en el marco del Programa Lunar.