Según informa la Guardia Civil en su comunicado del 22 de septiembre, esta organización criminal dedicada al cultivo y al tráfico de marihuana contaba con complejas instalaciones para el crecimiento rápido de las plantas, distribuidas en una docena de plantaciones "indoor" que han sido desmanteladas.
El entramado estaba dirigido desde Valls (Tarragona) por una mujer de nacionalidad serbia. Los 31 detenidos en esta operación son de nacionalidad española, británica, croata y serbia, algunos de los cuales tienen numerosos antecedentes por diferentes delitos en Serbia y estaban siendo buscados por las autoridades judiciales de este país.
Desmanteladas 12 plantaciones de marihuana que contaban con instalaciones para el crecimiento rápido de las plantas. Es la estructura criminal de cultivo y tráfico de marihuana + importante desarticulada por la @guardiacivil en Cataluña este año. ➕ℹ👇https://t.co/94FGSSWoYH pic.twitter.com/7X0OYJuRmz
— Guardia Civil 🇪🇸 (@guardiacivil) September 22, 2020
Cultivo de marihuana en chalets alejados de la ciudad
La investigación de la Guardia Civil comenzó en julio de 2019 al producirse un incendio en una vivienda de Olivella (Barcelona), donde se descubrió que su origen había tenido lugar en la instalación eléctrica ilegal que abastecía una plantación de marihuana. La líder de la organización criminal y su pareja sentimental, un ciudadano inglés, alquilaban y ocupaban chalets situados en zonas residenciales y aisladas de Barcelona y Tarragona para el cultivo de la marihuana.
Las tareas de vigilancia de las plantaciones corrían a cargo de ciudadanos serbios a los que la líder de la organización "contrataba", pagaba el viaje hasta España y un "sueldo" fijo por sus servicios, los cuales eran sustituidos cíclicamente para no levantar sospechas. Esta organización distribuía la droga ya procesada y empaquetada al resto de Europa mediante transporte terrestre.