El país norteamericano que presume de su democracia le plantó cara a su pasado oscuro en estos días, luego de que Dawn Wooten, una enfermera del centro de detención del condado de Irwin, en el estado de Georgia, denunciara histerectomías a mujeres migrantes sin su consentimiento previo.
Mientras, el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes de EEUU expresó preocupación por la denuncia y prometió analizar las "increíblemente graves acusaciones". Incluso, la congresista Chellie Pingree, del Partido Demócrata, indicó que si se confirman los reportes, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE por su sigla en inglés) debe ser llevado ante la justicia por los tratamientos inhumanos en sus instalaciones.
"La esterilización forzada es una horrible violación de los derechos humanos, con un pasado inquietante, estrechamente vinculado a la supremacía blanca y el genocidio", dijo Pingree.
La lucha contra 'genes malos'
La pseudociencia de la eugenesia basada en los estudios del investigador británico Francis Galton, primo y alumno del biólogo Charles Darwin, dio origen a la primera ley de esterilización en EEUU, que se aprobó en 1907 en el estado de Indiana. Sin embargo, las legislaciones eugenésicas ya existían por aquel entonces, en Connecticut estaban prohibidos matrimonios de "epilépticos, imbéciles y subnormales".
En 1924, en Virginia se aprobó el Acta de Integridad Racial, que implementaba la segregación racial y se implementó la esterilización forzada bajo los mismos principios que Indiana. Unas leyes similares se adoptaron en muchos otros estados de EEUU, y la práctica de esterilizaciones forzadas se extendió a las indígenas, afroamericanas y latinoamericanas.
Entre 1930 y 1970 EEUU practicó esterilizaciones de mujeres en Puerto Rico, las cuales se presentaron como una forma de control de los nacimientos. Algunos años después se descubrió que las mujeres no habían recibido la información completa sobre la operación y luego lamentaron haberla aceptada.
También se realizaron esterilizaciones a mujeres latinas en Los Ángeles. Y se supone que detrás del programa de control de los nacimientos siempre hubo motivos raciales.
Entre 1907 y 1970 fueron esterilizados bajo leyes estadounidenses al menos 60.000 personas.
Operaciones en georgia, ¿acción deliberada o negligencia?
Los estados de EEUU ya han ofrecido sus disculpas a las víctimas de las esterilizaciones forzadas, algunos, incluso, llegaron a ofrecer indemnizaciones a las mujeres. En ese contexto, cuesta creer que las operaciones a las que se sometieron las migrantes del centro de detención de Georgia hayan sido parte de un programa de esterilización forzada.
En sus declaraciones la enfermera Wooten tachó al ginecólogo que realizó las histerectomías no consentidas de "recolector de úteros" y recalcó que esa operación fue su "especialidad".
"Toda aquella a quien veas tiene histerectomía, casi todas", dijo Wooten al señalar que en muchos casos las enfermeras obtenían el consentimiento simplemente "usando Google" para comunicar la información en español.
Además de las operaciones posiblemente innecesarias, la enfermera denunció otras irregularidades como condiciones sanitarias no adecuadas, la falta de seguridad relacionada con el COVID-19 y el confinamiento solitario de las detenidas que se quejaban.
