"Nos encontramos con Svetlana Tijanóvskaya antes de la reunión del Consejo de ministros de Exteriores", escribió Borrell en su cuenta de Twitter, agregando que "la UE no tiene ninguna agenda secreta".
El jefe de la diplomacia europea subrayó que "el pueblo bielorruso debe ser capaz de elegir libremente a su presidente, sin persecución ni represión" y "solo un diálogo nacional inclusivo puede conducir a una solución pacífica y sostenible" de la crisis política en el país.
Además, el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores destacó que la situación en Bielorrusia se hace cada vez peor y las represiones contra las protestas pacíficas continúan.
En este contexto se prevé que los cancilleres europeos durante su reunión "discutan cómo apoyar al pueblo bielorruso, así como reconsideren las relaciones con el Gobierno de Bielorrusia en las condiciones de no reconocimiento de [Alexandr] Lukashenko como presidente legítimo", señaló Borrell.
A su vez, Tijanóvskaya llamó a los líderes de la UE a no reconocer a Lukashenko como presidente legítimo y no financiar su Gobierno.
"No apoyen al régimen con finanzas, no reconozcan a Lukashenko como un líder legítimo y consideren al Consejo de Coordinación un órgano legítimo del pueblo de Bielorrusia para mantener diálogo con las autoridades", dijo Tijanóvskaya a la prensa, al responder con qué mensaje intervendrá en la reunión de los ministros de Exteriores europeos.
La Cancillería bielorrusa condenó la participación de Tijanóvskaya en esa reunión, tachándola de "una injerencia flagrante en los asuntos internos" de Bielorrusia.
Otra bielorrusa Olga Kovalkova, del opositor Consejo de Coordinación, al intervenir ante los diputados del Parlamento Europeo en Bruselas, llamó al diálogo entre la sociedad y las autoridades de Bielorrusia con la mediación de la Unión Europea (UE), Estados Unidos y Rusia.
"Les pedimos (...) que exijan el diálogo entre la sociedad bielorrusa y el expresidente [Alexandr Lukashenko] con la mediación de la UE, EEUU y Rusia", dijo.
Los cancilleres europeos abordaron este 21 de septiembre las sanciones individuales adicionales contra varios funcionarios bielorrusos por el presunto fraude electoral durante los comicios presidenciales del 9 de agosto y por el uso de la fuerza contra los manifestantes.
Después de la sesión Borrell agregó que los cancilleres de los países de la UE no lograron tomar una decisión sobre las sanciones contra Bielorrusia, el tema será examinado en la próxima cumbre comunitaria.
"Este tema será examinado por los jefes de Estado y Gobierno en el Consejo Europeo más tarde esta semana", afirmó a la prensa.
Añadió que "hoy fue imposible acordar las sanciones, porque no hubo unanimidad".
Borrell destacó que los ministros de Exteriores de la UE confirmaron que no reconocen a Alexandr Lukashenko como líder legítimo de Bielorrusia.
"Según nuestros datos, las elecciones fueron falsificadas; por eso no reconocemos a Lukashenko como el líder del país", dijo.
Afirmó también que los países de la UE apoyan el deseo del pueblo bielorruso de celebrar nuevas elecciones bajo la égida de la OSCE. Subrayó que la UE no busca intervenir en los asuntos internos de Bielorrusia.
En Bielorrusia continúan las protestas por el escrutinio de las elecciones presidenciales del pasado 9 de agosto, que otorgaron el sexto mandato a Alexandr Lukashenko, en el poder desde 1994.
