Nvidia anunció un acuerdo de 40.000 millones de dólares con la compañía privada Arm Holdings. El negocio de Arm es inusual porque solo crea la arquitectura de los chips. El modelo de negocio se basa en las tasas de licencia y las regalías.
"Hay más procesadores en el mundo diseñados por Arm que por cualquier otro que no sea Intel", aseguró el profesor de informática de la Universidad de Washington, Pedro Domingos, citado por Marketwatch.
Arm ha tenido éxito en gran medida porque su arquitectura de chips requiere menos energía que los chips de Intel y otros. Y debido a que Arm no fabrica ni vende chips, los clientes han pensado por mucho tiempo que es una parte neutral en la industria.
Las acciones de Nvidia subieron 5,8% después de la noticia del acuerdo. Sin embargo, hay preocupaciones sobre si el trato se completará. Nvidia y SoftBank, propietario de Arm, pusieron un plazo de 18 meses para el proceso de cierre. Este plazo puede ser demasiado grande, especialmente con un mayor enfoque en la geopolítica y la realización de acuerdos internacionales, indica el portal. Nvidia ha prometido dejar la sede de Arm en Cambridge, el Reino Unido, donde la compañía fue fundada en 1990.
"Nvidia mantendrá el modelo de licencia abierta de Arm y la neutralidad del cliente, sirviendo a los clientes de cualquier industria en todo el mundo", aseguró el CEO Jensen Huang.
El CEO, que fundó Nvidia en 1993, es uno de los líderes más innovadores de la tecnología. Si Huang tiene éxito, posicionará a Nvidia como una de las compañías de chips más poderosas del mundo. Arm ayudaría a Nvidia a construir chips para inteligencia artificial, la próxima generación de computación.
"Los chips de aprendizaje automático son la mitad del mercado mundial, y el apetito por la potencia de computación es básicamente ilimitado", afirmó Domingos. "Con Arm en la manga, Nvidia está en mejor posición que cualquier otro en el mundo", subrayó.
