"Si bien Siria está más tranquila que antes, continúan los incidentes preocupantes que podrían desestabilizar esa calma (...) Hago un llamamiento a todos los actores relevantes para contener estos incidentes violentos y desestabilizadores, aprovechar la relativa calma que existe y, como lo pide la resolución 2254, establecer un alto el fuego a nivel nacional para proteger a los civiles, mantener la seguridad internacional y apoyar un proceso de paz política", dijo Pedersen.
"Aliento a Rusia y Estados Unidos a avanzar en su diálogo y para ellos y otros actores clave, incluidos los Garantes de Astana y aquellos que se reúnen en el Small Group, y los miembros de este Consejo, a trabajar conmigo hacia nuestro objetivo común en Siria: un acuerdo político en línea con la resolución 2254", dijo el enviado de la ONU.
Siria se encuentra en una guerra civil desde 2011, en la que las fuerzas del Gobierno luchan contra numerosos grupos opositores y organizaciones terroristas.