"Estamos obligados a retirar las tropas de las calles, como ya había dicho, movilizar la mitad del Ejército y cerrar la frontera estatal occidental, en primer lugar con Lituania y Polonia", dijo Lukashenko al intervenir en un foro en Minsk.
Además afirmó que se reforzará la frontera con Ucrania.
"Nos vemos obligados a reforzar la frontera estatal, lamentablemente, con nuestra fraterna Ucrania", dijo.
A su vez, un representante de la Guardia Fronteriza de Polonia comentó a Sputnik que la frontera polaco-bielorrusa opera con normalidad.
Lukashenko afirmó también que Bielorrusia no necesita que otros países reconozcan las elecciones presidenciales celebradas en agosto, porque estas "se celebraron y son legítimas".
En Bielorrusia continúan las protestas por el escrutinio de las elecciones presidenciales del pasado 9 de agosto, que otorgaron el sexto mandato a Lukashenko, en el poder desde 1994.
En los primeros días de las protestas las fuerzas del orden recurrieron al gas lacrimógeno, las balas de goma, los cañones de agua y las granadas aturdidoras para dispersar a los manifestantes. Según el Ministerio del Interior, las movilizaciones se saldaron con tres muertos, centenares de heridos, entre ellos más de 170 agentes, y más de 6.700 detenciones.