"Abogamos por que los bielorrusos por sí mismos, sin sugerencias ni presión desde fuera, resuelvan esta situación tranquilamente a través del diálogo y elaboren una solución conjunta", afirmó Putin.
Préstamo de 1.500 millones de dólares a Bielorrusia
Putin corroboró este 14 de septiembre el otorgamiento de un préstamo de 1.500 millones de dólares a Bielorrusia.
"Hace poco el primer ministro ruso, [Mijaíl] Mishustin, visitó Bielorrusia (...) Se acordó que Rusia concedería a Bielorrusia un crédito de 1.500 millones de dólares para afrontar este momento difícil", dijo Putin.
El mandatario ruso espera que esa transacción se concretice pronto y se refleje debidamente en los mercados financieros.
"Actualmente los ministros de Finanzas de los dos países mantienen conversaciones", constató.
En ese sentido, el presidente ruso mencionó la construcción de la primera central nuclear en Bielorrusia, valorada en 10.000 millones de dólares.
La compañía rusa Rosatom, líder mundial en el sector de la energía nuclear, construye la planta que constará de dos reactores. Está previsto que la primera unidad generadora sea puesta en marcha en el cuarto trimestre de 2020 y la segunda, en 2022.
El líder ruso instó a la recuperación del comercio bilateral que se contrajo debido a la pandemia de COVID-19.
"El coronavirus impactó en el intercambio comercial entre los dos países, como en todo el mundo. En ese sentido, sugiero que hagamos esfuerzos adicionales no solo para restablecer el nivel anterior a la crisis, sino crear premisas para avanzar", sostuvo.
Putin llamó a trabajar a nivel de Gobiernos , ministerios y empresas para la recuperación de las relaciones económicas.
"Rusia cumple todos sus acuerdos, incluidos en el marco del Estado de la Unión [de Rusia y Bielorrusia] y de la OTSC [Organización del Tratado de Seguridad Colectiva]", recalcó.
Por su parte, Lukashenko declaró que los últimos sucesos demostraron que Bielorrusia debe estrechar aún más sus lazos con Rusia.
"La economía es el fundamento de todo y créame que siempre hemos seguido esta línea (de la cooperación con Rusia). Los últimos acontecimientos nos han mostrado que debemos estrechar más los lazos con nuestro hermano mayor y cooperar más en todos los ámbitos, incluido el económico", dijo el líder bielorruso en la reunión en Sochi.
Exportación de la vacuna anti-COVID-19 rusa a Bielorrusia
Además, el presidente ruso señaló que Bielorrusia será el primer país en recibir la vacuna rusa contra el coronavirus.
"Según lo acordado por nuestros primeros ministros, y luego los ministros de Sanidad, Bielorrusia será el primer país en recibir nuestra vacuna antiviral contra COVID-19 y ya ha comenzado a participar en la última etapa de los ensayos", dijo Putin.
Por su parte, el presidente bielorruso agradeció a Rusia los suministros de vacuna contra el nuevo coronavirus.
"En lo referente al coronavirus, les agradezco y apreciamos mucho que nos hayan puesto en la primera línea en el suministro de vacunas", declaró Lukashenko.
Subrayó que una segunda ola de la enfermedad ya se inició en Europa y expresó su preocupación de que sea más fuerte que la primera.
El pasado 11 de agosto Rusia registró la primera vacuna contra el COVID-19 que se desarrolló en el Centro de Epidemiología y Microbiología Nikolái Gamaleya y se producirá en cooperación con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RFPI).
Según los desarrolladores, la vacuna demostró una inmunogenicidad estable y protegerá contra el coronavirus por un plazo de hasta dos años.
A principios de septiembre comenzaron los ensayos posregistro, con la participación de unos 40.000 voluntarios.
El director del RFPI, Kiril Dmítriev, dijo que el fondo recibió solicitudes de más de 20 países para adquirir 1.000 millones de dosis de esa vacuna. Rusia, según él, logró acuerdos para producirla en cinco países, donde las capacidades disponibles permiten obtener hasta 500 millones de dosis al año.
Asuntos internos de Bielorrusia
A su vez, Lukashenko, agradeció al líder ruso y a todos los rusos el apoyo de la república durante la crisis tras las últimas presidenciales.
"Le agradezco personalmente a usted y a todos los rusos, a todos los (...) que nos apoyaron en ese tiempo poselectoral", dijo Lukashenko.
Prometió informar de una forma detallada a su par ruso de lo que pasa en Minsk los fines de semana.
Por su parte, Vladímir Putin calificó como "lógica y oportuna" su idea de empezar a trabajar en la Constitución de Bielorrusia.
"Sabemos de su propuesta de empezar a trabajar en el texto de la constitución y considero lógica y oportuna esa idea", dijo Putin a Lukashenko.
Posible agresión externa
Rusia y Bielorrusia deben preparar sus ejércitos para poder responder a una posible agresión externa, declaró Lukashenko.
Los países occidentales "realizan ejercicios cuando quieren; por lo tanto, nosotros también, si usted apoya esta tesis, sin forzar la situación, prepararemos nuestros ejércitos para que eventualmente, Dios no lo permita, podamos resistir" ante una posible agresión externa, dijo Lukashenko.
En este contexto, el mandatario señaló que Bielorrusia y Rusia continuarán realizando maniobras conjuntas.
"Planificaremos estos ejercicios para los próximos años", indicó Lukashenko.
"Durante el año, tanto en Bielorrusia como en Rusia, tenemos algún tipo de actividades casi todos los meses", precisó.
Asimismo, Moscú continuará cooperando con Minsk en materia de defensa, sobre todo en lo que respecta a las empresas de defensa, agregó el líder ruso.
Putin enfatizó además que las unidades rusas que esta semana participan en los ejercicios militares conjuntos en Bielorrusia volverán a sus posiciones en Rusia después de esas maniobras, que fueron planificadas y anunciadas aún el año pasado.
La reunión de Putin y Lukashenko se celebra en la ciudad rusa de Sochi.
Unos fragmentos del encuentro fueron transmitidos por el canal Life.
Según el escrutinio oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1% de los votos, seguido de la opositora Svetlana Tijanóvskaya, con el 10,12%. Los otros tres candidatos opositores reunieron juntos poco más del 4%.
La oposición bielorrusa denunció numerosas irregularidades electorales y por ello exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko ha descartado en términos contundentes.
