"No participó, no es prerrogativa del presidente, es una decisión exclusivamente de los médicos que tiene que ver con el estado de salud del paciente", dijo Peskov ante la pregunta si Putin había participado en las negociaciones para trasladar a Navalni de la ciudad rusa de Omsk a Berlín.
Además, comentó el portavoz, no había razón para celebrar negociaciones internacionales.
"No hubo ningún motivo para negociaciones internacionales, pero las respectivas autoridades lo hicieron todo bien rápido… Todos los trámites necesarios para salir del país se hicieron rápidamente después de que los médicos consideraran posible el traslado del paciente", refirió el representante del Kremlin.
Su portavoz, Kira Yarmysh, supuso desde un principio que habría sido envenenado con alguna sustancia puesta en su té, lo único que tomó por la mañana en el aeropuerto.
Sin embargo, los médicos del hospital de Omsk declararon que el principal diagnóstico de Navalni es un trastorno metabólico, provocado por una fuerte caída del nivel de azúcar en la sangre.
El 22 de agosto un avión medicalizado de la ONG Cinema for Peace trasladó a Navalni de Omsk a Berlín.
El estado de Navalni sigue siendo estable dentro de la gravedad, según la ONG.