"El 18 de agosto, conforme a los planes de instrucción de combate en el Ejército bielorruso, los aviones An-26 50 SAB, Yak-130 116 ShAB y Su-30SM 61 IAB realizarán vuelos a lo largo de la frontera estatal", señala la nota.
Se destaca que "los pilotos de los aviones 116 ShaB y 50 SAB formarán pares y realizarán maniobras conjuntas".
El Ministerio de Defensa bielorruso precisó que las tropas terrestres se desplazan por ferrocarril y que los ejercicios en el marco de la instrucción de combate se realizarán en uno de los polígonos de la Fuerza Aérea y Defensa Antiaérea.
El 9 de agosto Bielorrusia celebró elecciones presidenciales. Según los resultados de los comicios anunciados por la Comisión Electoral Central, Lukashenko obtuvo más del 80% de los votos, mientras que su principal rival, Svetlana Tijanóvskaya, un 10% de los apoyos.
La oposición no reconoció el escrutinio oficial y en contra de la victoria de Lukashenko en el país estallaron fuertes manifestaciones que encontraron una represión brutal: para dispersar las protestas, los agentes del orden recurrieron a gas lacrimógeno, balas de goma, cañones de agua, granadas aturdidoras e incluso fusiles con acción de bombeo.
Lukashenko sostiene que la situación en Bielorrusia se debe a una "injerencia externa" que sigue las pautas de "revoluciones de colores". El 15 de agosto Lukashenko afirmó que acordó con Putin que Rusia ayudará a Bielorrusia a garantizar su seguridad si Minsk se lo pide.