La Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés) emitió la alerta a doctores y técnicos de laboratorio que utilizan la prueba genética TaqPath, de Thermo Fisher. Los reguladores dijeron que problemas relacionados con el equipo y el software utilizado para aplicar la prueba podrían derivar en imprecisiones.
El primer inconveniente está relacionado con el equipo de centrifugado de las muestras. El segundo, con el software usado en la plataforma de Thermo Fisher para realizar las pruebas.
En julio, funcionarios de salud pública del estado de Connecticut reportaron que al menos 90 personas habían recibido falsos positivos. La FDA indicó a los laboratorios que sigan las nuevas instrucciones y que deben actualizar el software a una nueva versión.
La autoridad sanitaria autorizó el uso de emergencia de la prueba de Thermo Fisher a mediados de marzo. La prueba se coloca en una máquina automatizada que se emplea en muchos laboratorios comerciales para detectar enfermedades como VIH, hepatitis y gripe.
Estas pruebas constituyen una gran parte de las miles que se realizan a diario en EEUU. El país norteamericano sigue siendo el más afectado por la pandemia de coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19, con más de 5,4 millones de casos registrados y 170.000 fallecidos.