"Apoyamos los pedidos de una investigación inmediata, imparcial, creíble e independiente basada en los principios de derechos humanos para examinar todas las reclamaciones, preocupaciones y necesidades en relación con la explosión, así como las fallas subyacentes de derechos humanos", dice el comunicado.
Los expertos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) dijeron que están dispuestos a cooperar en la investigación con las autoridades libanesas, la sociedad civil y la comunidad mundial.
La investigación debe considerar las obligaciones internacionales de Líbano que guían el manejo de sustancias peligrosas y el derecho de todas las personas a conocer los riesgos para la salud de la exposición al óxido nitroso y los contaminantes liberados al aire, dijeron los expertos.
La explosión puso de relieve problemas sistémicos, falta de buen Gobierno y acusaciones de corrupción generalizadas, dijeron los expertos.
El 4 de agosto, una poderosa explosión golpeó el puerto de Beirut matando a más de 170 personas e hiriendo a más de 5.000.
Según las autoridades, la explosión estuvo relacionada con 2.750 toneladas de nitrato de amonio, confiscado por los servicios de aduanas en 2014 y almacenado en el puerto.