Durante la primera semana de agosto de 2020, el proceso anunciado por el Gobierno mexicano trazando un camino para la eliminación del glifosato de los campos mexicanos sufrió un revés que hizo tambalear su concreción.
En ese contexto, más de 50 organizaciones mexicanas y personalidades ligadas a la investigación del tema, como la Unión de científicos comprometidos con la sociedad, expresaron su respaldo al proceso de eliminación del químico, dada la amplia evidencia producida en el Continente sobre los graves efectos que tiene el principal herbicida de la agricultura industrial para la salud humana de los territorios en dónde utiliza.
"Señor Presidente, no dé marcha atrás en la decisión asumida por su Gobierno de avanzar hacia la prohibición progresiva del glifosato para el año 2024. Es el primer paso para una transición agroecológica que nos dé autosuficiencia y soberanía alimentaria de manera sana y segura para México", piden los firmantes abajo descritos.
Un peligro para México
Según el desplegado dirigido al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, emitido este 10 de agosto en México al que Sputnik tuvo acceso, los firmantes expresan "la necesidad de que el Gobierno que encabeza mantenga la decisión asumida de programar el retiro progresivo del glifosato de los campos de México".
Los firmantes apuntan además al costado económico del asunto: "el glifosato así como otros herbicidas y plaguicidas altamente peligrosos implican cuantiosos costos al Gobierno", una dependencia que se entronó durante los últimos 40 años en que la llamada "revolución verde" mutó las formas de practicar la agricultura a nivel mundial.
La alta dependencia de la agricultura industrial de químicos y otros tóxicos le ha valido coloquialmente el mote de "sistema adicto" dados los constantes incrementos que deben hacerse de las sustancias agregadas para que sigan siendo eficientes en la producción. Esto, lógicamente, ha provocado "consecuencias desastrosas para el medio ambiente, daños a la salud humana y violaciones a los derechos humanos de la población".
Explican que estos químicos no son necesarios para alcanzar la autosuficiencia alimentaria de México, como lo han señalado los representantes del sector de la agricultura industrial como los representantes del Consejo Nacional Agropecuario, en particular su Presidente, Bosco de la Vega, quien sostuvo públicamente que si se elimina el glifosato, los mexicanos van a poner en peligro su alimento.
"Es posible producir alimentos más saludables y nutritivos sin utilizar productos químicos, con prácticas agro-ecológicas, modelo con el que se pueden mejorar los rendimientos, reducir los costos de producción y dar alternativas para dignificar su labor en el campo", puede leerse en la carta enviada al presidente López Obrador.
Los firmantes de la carta son la Alianza Maya por las abejas Kabnaáli´on; la Alianza por nuestra tortilla, Alma Piñeyro Nelson investigadora de la Universidad Autónoma metropolitana (UAM, sede Xochimilco) Argelia Salinas Ontiveros, investigadora del Instituto de investigaciones económicas de la Universidad Nacional (UNAM): Animal Rebellion México; Asociación de consumidores orgánicos; Asociación interamericana para la defensa del ambiente; Asociación mexicana de productores de bio-insumos AC; Asociación Nacional de empresas comercializadoras de productores del campo (ANEC); Biopakal; Cafetitlán SPR; Comunidad de San Pedro Cafetitlán de Pochutla, Oaxaca; Campaña Sin Maíz no hay país; Carlos Arturo González Vicencio, Profesor jubilado de la Universidad Veracruzana; Carlos Ávila Bello, investigador de la Universidad Veracruzana; Unión de científicos comprometidos con la Sociedad; Central de organizaciones campesinas y populares; Centro de análisis e investigación Fundar; Centro de atención a la mujer trabajadora de Chihuahua; Centro de derechos humanos Fray Francisco de Vitoria de la Ciudad de México; Centro mexicano de derecho ambiental (Cemda) Centro para la Diversidad Biológica; Colectivo Zacahuitzco; Consejo indígenas por la defensa del territorio de Zacualpan; Cristina Barros, investigadora independiente; David Barkin, profesor UAM Xochimilco; Asociación civil Desarrollo y aprendizaje; Dra. Gabriela García Rodríguez del Instituto tecnológico de Minatitlán; organización civil El poder del consumidor; Elena Lazos Chavero, investigadora de la UNAM; Fabián García Moya, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo; Fondo Semillas; Frente de Defensa del Maíz de Colima; Greenpeace México; Grupo de estudios ambientales (GEA); Hermilio Navarro Garza, investigador del Colegio de Postgraduados; Huerto Roma Verde; Instituto de liderazgo Simón de Beauvoir; Asociación civil La cuadra provoca ciudad; Luis Tamayo, académico de la Universidad Autónoma de Querétaro; Asociación civil Luna del Sur; Manuel Fernández Guasti, investigador UAM Iztapalapa; Margarita Tadeo Robledo, académica UNAM; Mercado alternativo de Tlalpan; Movimiento Agroecológico mexicano; Movimiento campesino, indígena, afro-mexicano "Plan de Ayala siglo XXI"; Organización campesina Proyecto de Desarrollo rural integral Vicente Guerrero; Asociación civil Organización Ciudadana; Asociación Civil Prodefensa del Nazas; Asociación Civil Promotora de gestión y enlace para el desarrollo rural; Quetzalcóatl Orozco Ramírez, investigador del Instituto de Geografía de la UNAM; Raúl Rubio Cano, periodista; Red de acción en plaguicidas y sus alternativas en México (Rapam) Red Trasdisciplinaria por los derechos biolculturales; Rolando Valentín Benítez Sánchez coordinador de la Unión Nacional de Organizaciones campesinas autónomas; Asociación civil Semillas de Vida; Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional para el desarrollo de capacidades del sector rural (Inca rural); Tianguis alternativo de Puebla; Vía Orgániza y la Unión de científicos comprometidos con la sociedad.