"La Agencia para los Refugiados de la ONU lamenta informar que la lista de (...) los muertos por la destructiva explosión ocurrida en Beirut el 4 de agosto incluye también al menos a 34 refugiados fallecidos", dijo.
La agencia de las Naciones Unidas no descarta que "pueda aumentar más el número de muertos entre los aproximadamente 200.000 refugiados que se encuentran en Beirut".
Según Baloch, ACNUR continúa trabajando junto con los rescatistas y los activistas humanitarios para identificar a las víctimas, así como proporcionar la ayuda necesaria a las familias de los afectados.
Al menos 158 personas murieron, más de 6.000 resultaron heridas y alrededor de 300.000 se quedaron sin techo después de que 2.750 toneladas de nitrato de amonio, almacenadas de forma inadecuada desde 2014 en el puerto de Beirut, detonaran el 4 de agosto.
La explosión desató una nueva espiral de violentas protestas antigubernamentales en la capital libanesa y provocó la dimisión del Gobierno.