"El COVID-19 genera un alto riesgo de aumento de embarazo en niñas y adolescentes en toda América Latina y el Caribe", afirmó Plan Internacional en un informe.
Sostuvo que la pandemia está exacerbando los problemas existentes en la región, que ya tiene la segunda tasa más alta de nacimientos adolescentes en el mundo, estimada en el 66,5% de los nacimientos por cada 1.000 niñas de 15 a 19 años.
En Guatemala se han registrado 1.962 embarazos en niñas de entre 10 y 14 años entre enero y mayo de 2020; en 2019 ocurrieron 1.816 nacimientos en el período enero a septiembre, dijo Plan Internacional.
"El confinamiento no solo redujo la capacidad de los sistemas de salud, sino que impidió el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva para niñas y adolescentes víctimas de violencia de género o abuso sexual", dijo Amalia Alarcón, Gerente Regional de Programas Transformadores de Género e Influencia de Plan International.
En América Latina, cada año nacen 2.000.000 de niños y niñas de adolescentes femeninas de entre 15 y 19 años.
El 15% de todos los embarazos registrados en la región se producen en niñas y mujeres menores de 20 años.