El plan prevé alternar nueve días de apertura (del 1 al 9 de agosto) con 12 de restricción (del 10 al 21) y otros nueve de reapertura (del 24 al 30) para "dar un respiro económico a la población".
Se mantendrá la prohibición de espectáculos públicos, festejos populares, actividades de entretenimiento en centros comerciales, bares, discotecas, actividades y procesiones religiosas y otros, que implican un alto riesgo de contagios.
"Pasaremos a periodos de apertura y de cierre, buscando el balance entre la apertura de la actividad económica y productiva, y la salud para no saturar el sistema hospitalario", señaló el presidente costarricense, Carlos Alvarado.
Durante el último día, según el Ministerio de Salud, se registraron 456 nuevos de COVID-19 y ocho fallecimientos más por esta causa en Costa Rica, para un total de 16.800 casos confirmados y 133 decesos.
El balance incluye 4.050 recuperadps y 12.617 casos activos, entre ellos 334 pacientes hospitalizados y 75 en UCI.