El medio observa que las autoridades danesas prohibieron llevar a cabo cualquier trabajo de construcción hasta finales de septiembre.
Parece que la naturaleza jugó a favor de los políticos: el 22 de julio, el secretario de Estado de EEUU Mike Pompeo llegó a Dinamarca.
Como parte de la visita, se reunió con la primera ministra Mette Frederiksen y el ministro de Asuntos Exteriores Jeppe Kofod. El secretario de Estado subrayó que EEUU será más activo en la defensa de sus intereses geopolíticos.
Washington está en contra de la ejecución del proyecto Nord Stream 2, puesto que busca promover sus suministros de gas natural licuado a Europa. En diciembre, Estados Unidos adoptó un presupuesto de defensa que preveía sanciones a las empresas que participan en la construcción del gasoducto, lo que provocó la negativa de la suiza Allseas de participar en el proyecto.
En respuesta, Rusia anunció que es capaz de completar la construcción con la ayuda del buque ruso Akademik Cherski.
Sin embargo, como los trabajos se realizaban en una zona donde se habían hundido muchas minas y municiones durante la Segunda Guerra Mundial, los buques rusos necesitaban un permiso especial para trabajar con anclaje. A principios de julio, el Gobierno danés permitió que los barcos completaran el proyecto.
El 23 de julio, el Senado de EEUU aprobó el presupuesto de defensa para el próximo año. Prevé la introducción de nuevas sanciones contra Nord Stream 2.
A finales de junio, la agencia Bloomberg informó que Alemania se prepara para contraatacar a Estados Unidos si este cumple su amenaza de intentar bloquear el gasoducto Nord Stream 2.
🇪🇺 Un diario alemán analiza la opción de que Europa tome medidas de represalia contra el gas de esquisto estadounidense para defender sus propios intereses en el proyecto conjunto con Rusia del Nord Stream 2
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) July 3, 2020
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