El Vaticano responde a Pedro Sánchez que nunca se ha pronunciado sobre la exhumación de Franco

El Vaticano ha reiterado que no tuvo nada que ver en la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco, ya que no es su competencia. Así contesta la Santa Sede a las palabras del presidente de España, Pedro Sánchez, después de que este dijera a un periódico italiano que recibió ayuda del Papa en este tema.

Con un breve comunicado publicado el 22 de julio quería el Vaticano zanjar el asunto.

"La Santa Sede, sobre el asunto de la exhumación de Francisco Franco, ha reiterado en varias ocasiones su respeto a la legalidad y a las decisiones de las autoridades gubernativas y judiciales competentes, ha instado al diálogo entre la familia y el Gobierno y no se ha pronunciado nunca sobre la oportunidad de la exhumación ni sobre el lugar de la sepultura, porque no es de su competencia", reza el texto.

Declaración institucional a raíz de la entrevista de Pedro Sánchez concedida al Corriere della Sera y publicada el 8 de julio. En esta, el presidente de España destacaba las relaciones "serenas" con El Vaticano y la ayuda del Papa Francisco con la exhumación de Franco. "Francisco es un papa carismático, espero poder encontrarle. Le cuento una cosa. En el tema de los restos de Franco me ha ayudado. En el Valle de los Caídos había una comunidad de benedictinos muy contraria a la exhumación. He pedido la intervención del Vaticano. Y todo se resolvió", afirmaba Sánchez a la cabecera italiana.

Los restos del dictador salieron del Valle de Los Caídos el 24 de octubre de 2019 en dirección al cementerio de Mingorrubio, situado en el madrileño barrio de El Pardo y donde está enterrada su mujer, Carmen Polo. Desde el momento en el que Sánchez comenzó a mostrar su voluntad de exhumar a Franco, el Vaticano comentó que no se opondría si el Estado español decidía cumplir con este propósito.

En 2018, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, se reunió con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, para tratar la salida del dictador, principalmente para que no fuera sepultado en la catedral de la Almudena, en Madrid, como quería su familia.