"La falta de pruebas y la motivación política de esas filtraciones informativas es evidente. Lo triste es que no solo nuestros socios de EEUU participan en dichas provocaciones", dijo el diplomático en declaraciones a la revista Vida Internacional, al responder a una pregunta sobre los supuestos intentos de Moscú y Pekín de robar una vacuna contra el COVID-19.
Según Krutskij, "las campañas de desinformación, especialmente en el campo de la salud, se llevan a cabo para manipular la opinión pública".
"Rusia defiende excluir la posibilidad de una determinación arbitraria, tendenciosa, de las fuentes de amenaza cibernética, sin la presentación de pruebas adecuadas por parte de los Estados", agregó el representante de la Cancillería rusa.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, rechazó esas acusaciones, mientras el director general del Fondo de Inversión Directa de Rusia (RFPI, por sus siglas en ruso), Kiril Dmítriev, explicó que Rusia no tiene ningún interés en robar al Reino Unido datos sobre el desarrollo de la vacuna, ya que la empresa farmacéutica global AstraZeneca, con sede en Londres, decidió fabricarla en territorio ruso, desde donde se prevé suministrarla a entre 30 y 50 países.
Ciberataques contra instalaciones vitales
Andréi Krutskij también señaló que Rusia llama a la comunidad internacional a comprometerse a no realizar ciberataques contra las instalaciones sanitarias y la infraestructura clave.
"Rusia comparte la opinión de varios países sobre la necesidad de proteger la infraestructura de información y comunicación en el sector sanitario", dijo.
Krutskij subrayó que la pandemia del COVID-19 "mostró claramente los riesgos y las consecuencias de una actividad maliciosa" que aprovecha vulnerabilidades cuando la sociedad vive un periodo difícil.
"Trabajaremos en esta dirección en las plataformas de negociación de la ONU sobre seguridad de la información internacional", agregó.
Acusaciones de ciberataques de Berlín
Además, Krutskij indicó que las acusaciones de Berlín contra Moscú por supuestos cibertataques contra el Bundestag muestran la solidaridad obligada con Occidente o representan un intento de Alemania de saldar las cuentas de EEUU por el Nord Stream 2.
La semana pasada, se informó que Alemania propuso a la Unión Europea sancionar a los responsables del ciberataque al Bundestag en 2015.
Krutskij mostró en una entrevista a la revista Vida Internacional su asombro ante el hecho de que el caso se mantuviera a la sombra, "recogiendo polvo", durante más de cinco años, y luego de pronto "explotara".
El representante de la Cancillería rusa subrayó que si Berlín realmente cuenta con ciertas pruebas presentadas por Washington, Moscú está dispuesta a estudiarlas, aunque resaltó que la práctica muestra que esos documentos nunca son presentados.
"Necesitamos hechos, y no 'el gran grado de probabilidad' que esgrimen tan activamente los medios alemanes, en su ausencia rechazamos las acusaciones infundadas y profundamente politizadas de una supuesta implicación de estructuras estatales rusas en los ciberataques contra el Bundestag en 2015", declaró el funcionario.
Para Krutskij, los cargos que presenta Berlín persiguen en realidad desacreditar a Rusia ante la opinión pública internacional, adjudicándole la imagen de país agresor.
"Alemania frustró de manera unilateral las consultas interministeriales de alto nivel ruso-germanas, dedicadas a la ciberseguridad, y constantemente lo sigue haciendo de forma deliberada, bajo diversos pretextos, para evitar la reanudación de ese útil formato de interacción, en el que podrían eliminarse todos los problemas", recalcó el diplomático.
Krutskij instó a reanudar las consultas entre Moscú y Berlín, que podrían eliminar tensiones innecesarias y llevar a la práctica la cooperación en la seguridad digital.
Berlín afirma que existen "pruebas de peso" de que Badin era agente de la Inteligencia militar de Rusia, pero hasta el momento no las dio a conocer, sin embargo, planea intensificar el régimen de "cibersanciones" contra Rusia en relación con este asunto.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, dijo en su momento que Alemania no presentó ninguna prueba de la participación de Rusia en dicho ataque contra el Bundestag.
Por su parte, el alto representante para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea, Josep Borrell, señaló el 2 de junio que no dispone de datos sobre el ciberataque contra el Bundestag que Alemania imputa a un ciudadano de Rusia, y por eso no puede comentar el asunto.