"Puedo decirles que la libertad de este señor, presunto responsable de los hechos, entre otros, de la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa, tuvo que ver con actos de corrupción del juzgado en donde se le otorgó la libertad. Espero que la Fiscalía presente todas las pruebas, y si una de las pruebas se da a conocer y queda nulificada, no le hace. Pero que se conozca que la gente se entere, ya van a haber otras pruebas", señaló.
El mandatario afirmó que tiene pruebas de los actos de corrupción, los cuales aseguró son "una afrenta a las instituciones y al Estado". Asimismo, aseguró que los responsables de esta acción serán castigados.
El gobernante dijo que "es un delito gravísimo, tiene que castigarse a los responsables espero que se actúe y ventile, que la gente los sepa, porque la justicia no solo es castigar al responsable, sino también evitar la repetición del ilícito".
La liberación de José Ángel Casarrubias Salgado fue ordenada por una jueza federal del Estado de México tras considerar que hubo deficiencias en las pruebas presentadas por el Ministerio Público. El Mochomo fue detenido el 24 de junio en el municipio mexiquense de Metepec por elementos de la Fiscalía General de la República, aunque su captura fue confirmada el 29 de junio por el fiscal general Alejandro Gertz Manero.
Entonces se afirmó que Casarrubias Salgado había sido detenido por su supuesta responsabilidad en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. Sin embargo, al ser recapturado se estableció el cumplimiento de una orden de captura contra El Mochomo por delincuencia organizada.
Las confesiones, que según expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) fueron obtenidas con torturas, indican que los restos calcinados fueron la lanzados al pequeño río San Juan, que corre cerca del basurero municipal.
Huesos calcinados recuperados de una bolsa en ese riachuelo permitieron la única identificación de joven estudiante desaparecido: Alexander Mora Venancio.