"No voy a cuestiones políticas electorales, es una visita de Estado que tiene que ver con el inicio del Tratado, por eso voy; el riesgo en la política es como caminar siempre en la cuerda floja, hay que correr riesgos y hay que tomar decisiones", dijo el mandatario en su conferencia de prensa diaria.
El jefe de Estado respondió así a las posibles ventajas que otorgaría a Trump, quien nada a contracorriente en las preferencias de las encuestas en esta temporada electoral, quien utiliza el tema migratorio para entusiasmar a sus seguidores con la promesa de terminar de construir un muro fronterizo, que pretende cobrar a México.
La primera gira internacional del jefe de Estado, desde su triunfo electoral del 1 de julio de 2018, contempla "solamente la actividad oficial la visita entre gobiernos, básicamente", precisó el jefe del Ejecutivo.
"Voy a EEUU a agradecer a Donald Trump por su gesto de apoyo y solidaridad [durante la pandemia de COVID-19], y voy a hacer un agradecimiento y reconocimiento a nuestros paisanos, porque nos están apoyando, enviando fondos a sus familiares en estos momentos", subrayó.
López Obrador destacó que los trabajadores mexicanos enviaron a sus familiares 4.000 millones de dólares en marzo pasado, un récord mensual, a pesar de que en EEUU se perdieron 20 millones de empleos hasta abril pasado.
Con Trudeau o sin él
López Obrador dijo que ha invitado también al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, pero que la repuesta de Ottawa no cambiaría su decisión de viajar.
"Estamos esperando la respuesta de Canadá, si no es así, ya tomé la decisión de ir a Washington a entrevistarme con el presidente Trump", anticipó.
"Acerca de los cuestionamientos, tenemos que decidir y actuar con criterio, tengo que hacer lo que más beneficie a México y lo que más ayude a los mexicanos, hemos mantenido una buena relación con el Gobierno de EEUU y el presidente Donald Trump", prosiguió.
Recordó que habló por teléfono con su homólogo estadounidense cuando comenzaba a cobrar intensidad la pandemia de COVID-19.
"Le pedimos apoyo para que se consiguieran equipos (médicos) y ordenó que se apoyara al Gobierno de México", aseguró.
Una parte de ese plan consiste en mejorar la capacidad de compra de los sectores populares, con programas sociales, para "que se fortalezca la capacidad de consumo, con apoyos y créditos entregados como nunca en estos meses", reseñó.
Anunció que, a partir del 1 de julio, el Gobierno adelantará cuatro meses de pensiones, por casi 50.000 millones de pesos (unos 2.000 millones de dólares).
El T-MEC permitiría al país latinoamericano "lograr que mejore sustancialmente la economía, que llegue más inversión y se generen empleos", enfatizó.
López Obrador viajará en vuelo comercial, pero descartó que sea el 1 de julio, cuando entra el vigor el T-MEC, porque ese día conmemorará el segundo aniversario de la victoria, en su tercera campaña presidencial.
La prensa mexicana adelantó que la fecha del viaje sería entre el 6 y el 10 de julio próximo, según una fuente diplomática.
Según el Fondo Monetario Internacional, las economías de México y EEUU se contraerán en 2020 10,5 y 8%, respectivamente.