"Los iraquíes no quieren una retirada precipitada de las fuerzas estadounidenses; no lo quieren porque saben que todavía les brindamos un muy buen apoyo mientras continúan sus operaciones contra ISIS", dijo durante un seminario web.
Estados Unidos confirmó sus planes de reducir aún más el número de militares desplegados en Irak.
La resolución fue aprobada después de que Estados Unidos mató al general Qasem Soleimaní, comandante de la fuerza de élite Quds, y Abu Mahdi Muhandis, un alto rango de las Fuerzas de Movilización Popular (milicias chiíes iraquíes respaldadas por Irán) en Bagdad.
Los miembros del Parlamento concluyeron que la acción de Estados Unidos violó la soberanía de Irak.
Asimismo, este 18 de junio McKenzie dijo que el diálogo estratégico entre Estados Unidos e Irak puede tener lugar en julio si las condiciones lo permiten.
El general dijo que el diálogo a nivel ministerial con el Gobierno de Irak les permitirá ir más allá del pilar de seguridad y hablar sobre el camino económico a seguir.
*autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países