"También tenemos que hacer las paces por siglos de violencia y discriminación, incluso a través de disculpas formales, procesos de decir la verdad y reparaciones en varias formas; necesitamos una acción asistida en todo el mundo no solo para reformar o reinventar instituciones específicas y agencias de aplicación de la ley, por importante que sea, sino para abordar el racismo generalizado que corroe las instituciones de los gobiernos, afianza la desigualdad y subraya tantas violaciones de los derechos humanos", afirmó Bachelet.
Bachelet alentó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a aumentar su enfoque en temas relacionados con la raza y la discriminación, así como a ir más allá de las recomendaciones existentes.
"Detrás de la violencia racial actual, el racismo sistémico y la política discriminatoria se encuentra el fracaso en reconocer y enfrentar el legado del comercio de esclavos y el colonialismo", dijo Bachelet.
Bachelet hizo el comentario durante una reunión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para abordar el racismo sistémico y la brutalidad policial en Estados Unidos.
Los manifestantes tomaron las calles en Estados Unidos y en numerosos países de todo el mundo después de la muerte del hombre afroamericano George Floyd bajo custodia policial en Minneapolis el 25 de mayo.
Un vídeo del arresto de Floyd publicado en línea muestra a un oficial presionando su cuello por al menos ocho minutos mientras Floyd repetidamente dijo que no podía respirar.
Sin embargo, muchas de las protestas se convirtieron en disturbios con violencia contra la Policía y los civiles, así como actos de vandalismo, incendio y saqueos.
