Los analistas de la institución helvética atribuyen el liderazgo de Singapur a sus sólidos resultados económicos en el comercio internacional e inversiones, así como a sus indicadores del empleo y el mercado laboral.
En el segundo lugar se ubicó Dinamarca al subir seis renglones. Le sigue Suiza que desbancó a Estados Unidos. El país norteamericano retrocedió al décimo puesto.
Países Bajos se situó en el cuarto renglón, seguido de Hong Kong que cerró el Top 5 de las economías más competitivas.
China bajó seis posiciones al ubicarse en el vigésimo puesto. El IMD achacó el retroceso de Estados Unidos y China a las disputas comerciales que mantienen ambas naciones.
Arturo Bris, director del IMD World Competitiveness Center, explicó que la ventaja de las economías menores durante la actual crisis consiste en su capacidad de combatir la epidemia y en su capacidad competitiva.
"Parcialmente se debe a que pueden hallar fácilmente la concordia social", apostilló Bris en un comunicado de prensa.
El índice de competitividad que se publica anualmente desde 1989 abarca a 63 países.
El estudio evalúa la capacidad de cada país para crear un clima competitivo y facilitar los negocios.