La revisión, que forma parte del plan de restructuración y reducción de emisiones contaminantes de la compañía, asume que el barril de petróleo de Brent rondará un promedio de cotización de 55 dólares desde 2021 a 2050 (unos 48,75 euros a la cotización actual).
"Hemos reajustado nuestras perspectivas de precios para reflejar el impacto y la posibilidad de mayores esfuerzos hacia una 'reconstrucción mejor' del mundo consistente con [la cumbre climática de] París", señaló el consejero ejecutivo, Benard Looney.
La revisión a la baja de los precios repercutirá en una reducción del valor de los activos de entre 13.000 millones y 17.500 millones de dólares, que BP contabilizará en los resultados financieros del segundo trimestre de 2020, previstos de publicarse en agosto.
El grupo británico estima que la pandemia del COVID-19 tendrá un "impacto duradero" en la economía global e impulsará la transición a energías verdes.