Renuncia del canciller uruguayo: ¿tambalea la coalición de Gobierno?

El anuncio de que el canciller uruguayo Ernesto Talvi renunciará a su cargo en un futuro cercano es "una complicación más" para Luis Lacalle Pou, quien lleva varios sobresaltos a la hora de conformar su equipo de Gobierno. En diálogo con Sputnik, el politólogo Daniel Buquet dijo que la salida puede dar "más soltura" a Talvi como líder político.

La posible salida del Gobierno uruguayo del canciller Ernesto Talvi suma "una complicación más a las que ya ha tenido" el presidente Luis Lacalle Pou en el manejo de la coalición de Gobierno que asumió el 1 de marzo de 2020, dijo a Sputnik el politólogo uruguayo Daniel Buquet.

Luego de que Talvi reconociera que habló con Lacalle Pou de una eventual salida del gobierno en un futuro cercano, el analista consideró que la noticia añade una dificultad  más "en el terreno de las designaciones de jerarcas políticos en cargos en los que luego no funcionan o no duran".

En efecto, desde su asunción en marzo, Lacalle Pou debió solicitar la renuncia de varios jerarcas debido a escándalos públicos o acciones que se apartaron del acuerdo programático de la coalición multicolor, como se denomina al acuerdo conformado por el Partido Nacional, el Partido Colorado, Cabildo Abierto, el Partido Independiente y el Partido de la Gente.

Así llegaron las renuncias de la empresa telefónica estatal Antel, luego de que Guillermo Iglesias aprobara la presupuestación de más de 850 funcionarios de la compañía. También debió renunciar el presidente de la Corporación Nacional para el Desarrollo tras conocerse las irregularidades en su incipiente gestión. Un director del prestador público de salud, ASSE, y el vicepresidente de la Asociación Nacional de Puertos también fueron apartados de sus cargos por declaraciones polémicas en redes sociales.

"En este caso además estamos hablando de un canciller. Evidentemente es un Gobierno que, en este plano, no está transmitiendo una imagen de un equipo compacto y unificado, con una visión clara y precisa de su línea de trabajo", sintetizó Buquet.

El politólogo recordó que la coalición de Gobierno encuentra dificultades de funcionamiento en que está conformada por dos partidos tradicionales (el Partido Nacional y el Partido Colorado) que tienen "fracciones internas" y un partido nuevo (Cabildo Abierto) "con un líder outsider y figuras que no vienen de la actividad política".

Esa particularidad hace que sea una coalición "muy fragmentada y compuesta por muchas piezas, varias de las cuales tienen comportamientos difíciles de predecir por su novedad política".

Para Buquet, dejar de integrar el Gobierno podría darle a Talvi la posibilidad de "ocupar una posición de liderazgo político en que podría moverse con más soltura".

El analista sostuvo que Talvi y su sector Ciudadanos apuntan a "ubicarse en el terreno del batllismo (corriente política que toma ideas del expresidente uruguayo José Batlle y Ordoñez), que se parece mucho a una posición socialdemócrata en términos programáticos".

A pesar del anuncio de su eventual alejamiento, Talvi respaldó la existencia de la coalición de Gobierno y aseguró que es "estable".