"Los representantes de la Oficina de Investigación hicieron entrega a Petró Poroshenko del documento que certifica que fue declarado sospechoso en un procedimiento penal", dijo el funcionario.
Se sospecha que el exlíder ucraniano emitió una orden ilegal que obligó al actual jefe del Servicio de Inteligencia Externo a "exceder los poderes oficiales".
Como precisaron en el servicio de prensa de la oficina, Poroshenko pudo haber presionado a su subordinado para que este nombrara a Serguéi Sémochko, quien anteriormente ocupaba el cargo de jefe del Consejo de Seguridad de Kiev, como jefe adjunto del servicio secreto.
El abogado de Poroshenko, Ilia Nóvikov, considera, no obstante, que la Oficina de Investigación entregó a su cliente el documento de una manera indebida, sin respetar el procedimiento necesario, según el cual debió ser la jefa de la Fiscalía General, Irina Venedíctova, quien debió presentar las sospechas.
"Hemos renunciado a contactar con la persona" que intentó hacer la entrega, dijo el jurista, agregando que actualmente el exmandatario abandonó el establecimiento estatal.
La Oficina de Investigación citó a Poroshenko para este miércoles 10 de junio para esclarecer el caso de las escuchas telefónicas de sus conversaciones con el ex vicepresidente estadounidense Joe Biden, precisando que el exmandatario figura en calidad de testigo.
El tribunal del distrito Pecherski de Kiev aceptó la petición de la Oficina Estatal de Investigación de Ucrania de permitir que el expresidente se sometiera a un interrogatorio de manera obligatoria, ya que en ocasiones anteriores Poroshenko ignoró ese tipo de citaciones.
A principios de octubre de 2018 el equipo de investigaciones periodísticas Bihus.info reveló desfalcos y fraudes en el Ejército ucraniano en los años 2015-2017.
Se afirma que durante el conflicto en Donbás la familia de Sémochko, que carecía de ingresos legales grandes, adquirió un inmueble con un costo de varios millones de dólares en Kozin, una localidad prestigiosa cercana a la capital.
Por otra parte, la familia del "espía ucraniano" figura en la base de datos de los contribuyentes de Rusia. Más tarde se confirmó que la esposa de Sémochko cuenta con ciudadanía rusa.
En abril de 2019 Poroshenko despidió a Sémochko.
