Las plantillas de las factorías se concentraron a las nueve de la noche al inicio de la Via Laietana y, media hora más tarde, comenzaron a recorrer la avenida hasta el paseo Colón al grito de "Nissan no se cierra". Luego se dirigieron a las Ramblas y la plaza de Catalunya. Allí, los asistentes (que la Guardia Urbana cifró en 1.200) han llevado a cabo una performance.
Bajo el lema Nissan: ¡Basta de mentiras! Exigimos un futuro real!, los trabajadores portaron ataúdes con las caras de los directivos de la compañía. Entre ellos, el encargado de desmantelar las plantas y antiguo director de operaciones, Frank Torres; el consejero delegado de la empresa, Makoto Uchida; y el presidente del consejo de administración de Renault España, José Vicente de los Mozos.
A esta marcha se le suma la huelga indefinida que llevan a cabo los empleados desde el 4 de mayo. Con mascarillas y puño alzado, los asistentes pidieron a la Generalitat que evite el cierre de las plantas. También culparon a la dirección de la multinacional por dejar en vilo a miles de familias desempleadas. En total, Nissan emplea en sus tres plantas de la Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca a unas 3.000 personas, pero los puestos de trabajo que genera su actividad se elevan hasta los 25.000 si se suma los de la industria auxiliar.