En sus redes sociales, el ministro publicó un mensaje de la petición que la Abogacía General de la Unión (representante del Gobierno) presentó ante el Tribunal Supremo Federal para aclarar si el Código Forestal (vigente desde 2012) debía aplicarse a este bioma, y añadió que se "revocaba" la medida provisional hasta que haya una decisión judicial firme.
Medida judicial da AGU para definir, de uma vez por todas, se aplica ou não as regras do Cod Florestal na mata atlântica. Diante dessa ação, revogamos o despacho que acolhia o parecer vinculante, para aguardar a decisão no processo pic.twitter.com/HusjKw9GTk
— Ricardo Salles MMA (@rsallesmma) June 4, 2020
En la práctica, la medida del ministro ahora anulada podía regularizar delitos como deforestación, invasiones de terreno e incendios cometidos hasta julio de 2008.
Sin embargo, la Fiscalía ya avisó el pasado mes de abril que la ley específica para esta selva seguía vigente a pesar de la publicación posterior del Código Forestal; este cuestionamiento fue decisivo para que el ministro diera marcha atrás.
La Mata Atlántica se distribuye sobre todo por los estados del noreste, sureste y sur de Brasil y es el bioma brasileño más deforestado; apenas queda el 12% de su cubierta vegetal original.
En los últimos años se había logrado frenar de forma significativa la deforestación (los porcentajes iban cayendo desde 2016), pero entre 2018 y 2019 volvieron a subir.
Según un informe reciente del estatal Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe), en este último periodo la deforestación aumentó un 27% respecto al periodo anterior, lo que supuso la destrucción de más de 14.000 hectáreas de selva.