"Para garantizar la implementación de la política estatal de la Federación de Rusia en el campo de la disuasión nuclear, decreto aprobar los fundamentos de la política estatal rusa en el campo de la disuasión nuclear", dice el documento.
El decreto también señala que la política estatal de Rusia en materia de disuasión nuclear es de carácter defensivo.
Destaca además que Rusia considera el armamento nuclear únicamente como medio de disuasión.
"La Federación de Rusia considera el armamento nuclear exclusivamente como un medio de disuasión que se usaría solo en caso extremo, y emprende todos los esfuerzos para hacer disminuir la amenaza nuclear y prevenir un agravamiento de relaciones interestatales capaz de provocar conflictos bélicos, incluidos conflictos nucleares", indica el documento publicado.
El documento entra en vigencia el día de la firma, el 2 de junio.
Según se precisa en los Fundamentos, la disuasión nuclear concierne a los países y bloques que ven en Rusia a un enemigo.
"Rusia aplica la disuasión nuclear respecto a los países y alianzas militares (bloques, uniones) que consideran a Rusia un enemigo y disponen de armamento nuclear o/y otras armas de destrucción masiva, o que tienen un potencial considerable de armas convencionales", indica el texto.
En todo caso, al aplicar la disuasión nuclear, "Rusia toma en consideración el despliegue de armas ofensivas del enemigo eventual (misiles balísticos y de crucero, vehículos aéreos hipersónicos, drones de ataque y otros) en el territorio de otros países y que podrían utilizarse contra Rusia y/o sus aliados".
Se destaca que la disuasión nuclear debe servir de señal de inminencia del castigo en caso de que el enemigo eventual decida atacar a Rusia y/o sus aliados.
"Rusia usaría el armamento nuclear si sufre (o sus aliados) un ataque con armas nucleares u otro tipo de armas de destrucción masiva, o con armas convencionales, si se viera amenazada la propia existencia del Estado ruso", dice el documento.
También podría recurrir al armamento nuclear en caso de recibir datos sobre el lanzamiento de misiles balísticos en dirección del territorio ruso, o si surge el riesgo de perder el control de las fuerzas nucleares como consecuencia de las acciones del enemigo.
Para Rusia, una de las mayores amenazas representaría el despliegue de armamento nuclear en países no nucleares.
Otras de las mayores amenazas militares sería el despliegue de sistemas antimisiles y armas ofensivas en el espacio, la proliferación incontrolada del armamento nuclear y la concentración de potenciales militares de un enemigo eventual cerca de las fronteras rusas.
El documento destaca que la política de Rusia en materia de disuasión nuclear podría corregirse a causa de los factores externos e internos.
"Los actuales Fundamentos de la política estatal de Rusia en materia de disuasión nuclear podrían corregirse según los factores externos e internos que influyen en las capacidades de defensa", dice el documento publicado.
