"Desde luego condenamos este paso", dijo en una rueda de prensa.
La diplomática rusa subrayó que "la decisión de EEUU es otra manifestación de la política de EEUU de violación grave del Plan de Acción Integral Conjunto para el programa nuclear iraní, y de la resolución 2231 del Consejo de Seguridad de la ONU".
La portavoz de la Cancillería rusa apuntó que "la comunidad internacional lleva mucho tiempo llamando enérgicamente a Washington a que vuelva a cumplir con sus compromisos" en el marco del PAIC, no obstante, según Zajárova, "la aversión de la élite política estadounidense a Irán supera la responsabilidad legal ante sus socios".
La diplomática rusa subrayó que la cancelación de las exenciones a las sanciones de EEUU "puede ralentizar pero no detener la implementación de los proyectos de reconfiguración importantes, en los que están basados los acuerdos de 2015".
La reacción de la UE
Por su parte, el alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, lamentó la decisión de Estados Unidos de poner fin a las exenciones a sus sanciones contra Irán, que permitían actividades nucleares civiles dentro del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC).
"El acuerdo sigue teniendo importancia para garantizar el carácter pacífico del programa nuclear iraní, por eso lamento la decisión de ayer el 27 de mayo de EEUU de no prorrogar las exenciones relacionadas con el PAIC", afirmó Borrell por videoсonferencia en una sesión de la ONU sobre el desarrollo internacional en las condiciones de la pandemia del coronavirus.
El PAIC fue firmado en 2015 entre Irán y Rusia, EEUU, Reino Unido, China, Francia, Alemania y la UE para establecer limitaciones al programa nuclear iraní y así excluir su posible dimensión militar, a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.
El 27 de mayo el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, anunció que Estados Unidos suspenderá las exenciones a sanciones relacionadas con el PAIC tras un período de liquidación de 60 días.
Según Pompeo, la decisión afectará a los proyectos de conversión del reactor nuclear en Arak —copresidido por China y el Reino Unido— el suministro de uranio enriquecido para el reactor de investigación en Teherán y la exportación de combustible del reactor de investigación gastado y desechado de Irán.
A la vez, EEUU decidió extender por 90 días la exención a sanciones para las entidades extranjeras que trabajan en el primer reactor de la central nuclear de Bushehr en Irán, construido por la rusa Atomstroyexport (forma parte de Rosatom).
No obstante, esta exención no se aplica a nuevos proyectos en la central, como la construcción de su segundo y tercer reactores, también encargada a Rusia.