El 26 de mayo la Cancillería rusa constató que Georgia hasta la fecha no había contestado a una nota enviada en junio de 2019 en la que instaba al acceso completo al establecimiento conocido como Centro Richard Lugar, incluidas las instalaciones que ocupan los biólogos del Pentágono, para una inspección real.
"Georgia está dispuesta a estudiar la forma en que se llevaría a cabo esa visita con otros países miembros de la Convención [sobre la Prohibición de Armas Bacteriológicas], pero no ve la posibilidad de que se trate de una visita unilateral", indicó el Ministerio de Exteriores del país caucasiano en un comunicado.
Rusia ha expresado en reiteradas ocasiones sus preocupaciones por los laboratorios biológicos del Pentágono cerca de sus fronteras.
Desde Moscú apuntan a que las autoridades estadounidenses y georgianas tratan de ocultar el objetivo real de los experimentos que realizan los biólogos militares norteamericanos en ese establecimiento. Supuestamente las fuerzas militares de Estados Unidos estudian enfermedades contagiosas.
En septiembre de 2018, el exministro georgiano de Seguridad del Estado Ígor Giorgadze reveló que había pedido al presidente estadounidense, Donald Trump, investigar la labor de este laboratorio del Pentágono en el que se estarían realizando experimentos en seres humanos. Según el exministro, más de 70 georgianos murieron en ese establecimiento entre diciembre de 2015 y agosto de 2016.
Giorgadze publicó documentos contundentes sobre el programa de armas biológicas de Estados Unidos en Georgia. Washington negó todas las acusaciones.
Desde China también llamaron a Estados Unidos a aclarar a la comunidad internacional las dudas que suscitan sus laboratorios biológicos en los países de la antigua Unión Soviética.