La aplicación basada en el código de salud recopilará datos sobre el historial médico del usuario, los resultados de los controles de salud e información sobre su estilo de vida. Según los indicadores recogidos, se asignará a cada persona un determinado índice de salud.
Hasta ahora, el código se ha usado para controlar la expansión del COVID-19 por China, pero ahora las autoridades locales quieren que el programa sea permanente.
La noticia provocó una ola de indignación en las redes sociales del país asiático. "No hay respeto por la privacidad. Ya hemos vencido a la epidemia", "es una interferencia en la privacidad", "¿qué es, si no una grave violación de la información confidencial? Las empresas tecnológicas realmente no conocen límites", dicen algunos de los usuarios chinos.
Cómo funciona el código
Durante el pico de la epidemia de coronavirus, la aplicación Alipay Health Code creada por Alibaba se utilizó en más de 200 ciudades de todo el país. Dependiendo del estado de salud del usuario, se le asignaba un código de color similar a los de un semáforo. El código verde daba al usuario la oportunidad de moverse por el país, el código amarillo indicaba que era mejor quedarse en casa durante una semana, y el código rojo obligaba a una cuarentena de dos semanas.
"Es una tecnología que fue creada en condiciones extremas propias de una epidemia. Su uso merece una gran atención y es también un indicador de las tendencias del desarrollo social y tecnológico. En mi opinión, aunque la epidemia haya terminado, estos códigos pueden aplicarse también a otras áreas. Es poco probable que dejen de utilizarse, ya que son de gran importancia para el desarrollo tecnológico actual y futuro. Además, es una oportunidad para que varias empresas y compañías mejoren la tecnología", cree el experto.
De acuerdo con el plan del Gobierno de Hangzhou, la aplicación será mejorada y habrá más criterios para evaluar la salud del usuario: la frecuencia con la que practica deporte, cuánto duerme, cuánto consume alcohol, si tiene malos hábitos o no. Estas mejoras son muy necesarias, opina Zhao.
Zhao no comparte la preocupación de algunas personas por la confidencialidad de la información personal.
"Creo que si la información personal de los usuarios está en posesión de un organismo de confianza, su seguridad está garantizada. Además, hay un aspecto cultural. Cree que en China la gente no se preocupa por la confidencialidad, no como en EEUU y otros países occidentales".
En su opinión, actualmente se nos exige proporcionar información de identificación en todas partes, y no debería ser muy distinta la administración de los datos sobre el estado de salud. Además, si nos preocupamos demasiado por la privacidad será muy difícil desarrollar reconocimiento facial avanzado.
"Por lo tanto, en mi opinión, todo debe ser sopesado adecuadamente. Después de todo, el desarrollo de tecnologías avanzadas se basa en su uso", concluyó.