El dueño de la tienda llamó a la línea de ayuda de serpientes y un especialista llegó para rescatar al animal.
Las imágenes muestran parte de una batalla de una hora para persuadir a la serpiente de salir. El especialista golpeó el aire acondicionado unas cuantas veces y la cobra siseó furiosa y levantó su capucha para atacarlo.
El cazador se dio cuenta de que la serpiente estaba atrapada dentro del aire acondicionado y lo desmontó parcialmente.
Tuvo que sujetar a la cobra con una mano y trabajar con la otra, ya que el animal ofrecía resistencia y atacaba continuamente.
Se informa que la cobra fue liberada más tarde en un bosque cercano.