El parón provocado por la expansión de la pandemia detuvo la actividad en las instalaciones de la compañía en Cartagena. Después de dos meses sin apenas trabajo, esta semana comenzaron a reincorporarse de manera escalonada los empleados de Navantia y empresas auxiliares de la planta, que suman casi 2.000 personas.
Durante estos días, la compañía naval negocia un nuevo día para el flote del Isaac Peral con la oficina del programa S-80, dependiente de la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa. Mientras, los trabajos en los astilleros se centran en la puesta a punto de la tensión eléctrica de la nave. Uno de los últimos pasos dados en su construcción fue el cierre del casco resistente en el mes de diciembre.
¿Qué es el submarino S-80?
Los S-80 son una serie de sumergibles españoles desarrollados por Navantia para la flota del país, aunque también destinados para la exportación. En el caso de España, estas nuevas naves sustituirán a los actuales S-70.
Esta tecnología, única en el mundo, será instalada primero en el S-83, en un principio en julio de 201, y después en el S-84. El S-81 y el S-82 lo incorporarán en su primera gran inmovilización, cuando ambas naves sean reacondicionadas.
El programa del S-80 comenzó en 2005, momento desde el que ha ido sorteando obstáculos, como un problema de sobrepeso, solucionado con un aumento de su longitud de 10 metros. Proyecto en el que España ha invertido 3.900 millones de euros.